Tanto el director de la Policía Nacional Civil (PNC), Howard Cotto, como el ministro de Justicia y Seguridad, Mauricio Ramírez Landaverde, manifestaron su deseo de que se aclare el caso de siete miembros del Grupo de Reacción Policial (GRP) acusados de la presunta ejecución sumaria de ocho personas en la finca San Blas de San José Villanueva, La Libertad.
Durante la entrevista de la edición matutina de Noticiero Hechos de Canal 12, ambos funcionarios endosaron todo su apoyo a dichos elementos élite, los cuales serán acusados formalmente este lunes por la Fiscalía General de la República.
Ramírez Landaverde señaló que los elementos policiales actuaron por “órdenes superiores”, ya que tenían la indicación de que en la zona se encontraba un grupo de pandilleros con historial de haber participado en varios crímenes y que además estaban planificando una masacre.
Al descubrir la localización de los supuestos pandilleros, Howard Cotto afirma que los policías fueron atacados y tuvieron que defenderse, matando así a ocho sujetos.
Por su parte, la Fiscalía asegura que entre los sujetos fallecidos se encuentra una persona que no tenía nada que ver con pandillas. Los elementos del GRP fueron señalados como parte de una red de policías que se estarían dedicando al sicariato en distintos puntos del país, de acuerdo con el Ministerio Público.