El hallazgo de un segundo cadáver de un hombre en la Isla de Ojuste, jurisdicción de Jucuarán, departamento de Usulután, confirma lo que las autoridades pensaron desde que el cuerpo de un líder comunal fue encontrado en la zona el pasado miércoles: Existe un cementerio clandestino en medio de los manglares del litoral usuluteco.
La Fiscalía ordenó a mediados de semana excavaciones en la zona ante la posibilidad que el sector, que está cercano a la Playa El Espino, fuera usado como cementerio clandestino. Este viernes fue encontrado un segundo cuerpo.
De acuerdo con las autoridades que trabajan en la zona, la nueva víctima encontrada tendría al menos dos a cuatro meses de ser asesinado, por lo que no se pudo determinar su identidad inmediatamente, pero si su sexo: masculino.
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Además, las características del lugar, el cual es un bosque húmedo de manglares, hace difícil el trabajo de la Policía y la identificación de las víctimas.
El primer hallazgo del cementerio clandestino se registró el miércoles y se trató de un anciano de entre 60 y 70 años, que había sido descuartizado en 50 pedazos y sus restos enterrados en una fosa al interior del cementerio.
Se cree que al menos otros cinco cuerpos estarían enterrados en el sector.