Un hombre aprovechó que dos niñas salieron solas a una tienda a comprar “churritos” e inventó una fiesta infantil para llevarlas a su casa y agredir sexualmente a una de ellas que en ese entonces tenía 8 años de edad. Los hechos sucedieron en el municipio de Chalatenango.
Fredy Antonio Mejía Rivas abordó a la víctima y a su hermana, a quienes les aseguró que en su vivienda podrían reventar piñatas y obtener dulces si lo acompañaban. Las menores se fueron con el hombre con la intención de divertirse en la supuesta celebración.
El acusado ingresó a las niñas a su residencia; a la niña de menor edad la dejó viendo televisión en la sala y a su hermana de ocho años, la introdujo a una habitación, la acostó en una cama y comenzó a realizar tocamientos en distintas partes de su cuerpo, pero la madre fue alertada por vecinos de la situación y evitó una posible violación tras sorprender al hombre manoseando a su hija.
El hecho sucedió el 14 de abril de 2014 y la mujer indignada interpuso la denuncia respectiva ante la Fiscalía General de la República.
Mejía Rivas fue llevado a los tribunales. Tras pasar las etapas procesarles, fue enjuiciado el pasado 2 de mayo, cuando uno de los jueces del Tribunal de Sentencia de Chalatenango analizó la prueba documental, testimonial y pericial del caso.
Después de la deliberación, el juzgador emitió una sentencia de ocho años de prisión para el imputado por el delito de agresión sexual contra un menor e incapaz.