La Fuerza Especial de Reacción, compuesta por mil efectivos entre policías y soldados, fue lanzada al terreno este miércoles, con la misión de operar en zonas rurales de mayor incidencia delincuencial.
Uno de los objetivos centrales de esta nueva fuerza será la localización y neutralización de delincuentes que huyen en montañas, cerros y zonas despobladas; así como la desarticulación de estructuras delictivas en las zonas rurales.
El director de la Policía Nacional Civil (PNC) Howard Cotto, señaló que esta fuerza será respetuosa de los derechos humanos: “La ciudadanía puede poner su confianza en estas fuerzas”, afirmó.
El vicepresidente Oscar Ortiz dijo por su parte que este contingente de fuerzas especiales buscará además la neutralización de estructuras dedicadas a la extorsión y acabar con los delitos que se ordenan desde los centros penales.
El vicemandatario argumentó también que el despliegue de este tipo de fuerzas no implica un regreso a medidas de mano dura, sino que es una “acción firme del Estado”.
“No podemos estar de rodillas ante los que toman de manera irracional las vidas de salvadoreños”, declaró Ortiz.
La Fuerza Especial de Reacción, también dada a llamar “Fuerza 24/7”, tendrá como sede el cuartel de la antigua Guardia Nacional.