Lo que pretendía ser una conferencia de prensa para aclarar el otorgamiento de un supuesto finiquito del expresidente, Mauricio Funes, terminó abriendo una caja de pandora ante la posibilidad de que el extitular de la Corte de Cuentas de la República (CCR), Rosalío Tóchez, haya entregado finiquitos a exfuncionario que no siguieron el debido proceso que manda la ley.
La respuesta a una solicitud de información reveló que la institución contralora no tenía registro que demostrara que el primer gobernante del FMLN haya tramitado dicho documento. Incluso el actual presidente de la Corte de Cuentas, Johel Valiente, reiteró que ni siquiera tienen copias del mismo, el cual valida el buen manejo de las finanzas públicas.
Una periodista cuestionó a Valiente sobre la posibilidad de que otros funcionarios hayan recibido un finiquito de forma “express”, al igual que el expresidente Funes, situación que dijo desconocer debido al presidencialismo que siempre ha imperado en la CCR y finalmente aceptó posibles irregularidades en la gestión de Tóchez.
“La presidencia ni la Corte de Cuentas podría saber si existen más documentos emitidos en la forma que estamos verificando”, dijo Valiente; sin embargo, dejó claro que según los registros de la institución, el expresidente Funes, nunca tramitó su finiquito, a pesar que publicó el documento que hizo público en sus cuentas personales de Twitter y Facebook.
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“No existe la solicitud ni la copia del finiquito. Lo que estamos diciendo es realmente no se siguió todo el procedimiento. A partir de este momento lo tenemos que someter a un análisis jurídico para determinar si se envía a la Fiscalía como la posibilidad del cometimiento de un ilícito”, reiteró Valiente al no saber explicar los parámetros que Tóchez usó para firmar en documento presentado por el exmandatario.
“Ninguna otra persona más que el presidente (Rosalio Tóchez) fue el responsable de haberlo admitido. No existe rastro de la emisión del documento. Pudiéramos decir que el procedimiento sí parece express, como se dicen en buen salvadoreño”, añadió Valiente.
Por su parte, Lisando Campos, coordinador general jurisdiccional de dicha institución, afirmó que recibía muchas órdenes verbales de Tóchez, una de ellas, fue chequear las auditorías realizadas a la gestión del expresidente Funes, y por la misma vía, informó que el gobernante no tenía reparos o hallazgos respecto a su gestión frente al Ejecutivo, pero dijo desconocer si se otorgó o no el finiquito fechado el 23 de junio de 2014.
La ley establece que un exfuncinario que solicite un finiquito debe presentar una solicitud en la correspondencia de la CCR, indicando sus datos personales, instituciones en las que laboró, el periodo, luego se envía la presidencia para su marginación e inicia el procedimiento para realizar la auditoria correspondiente.
Si el funcionario no tiene reparos, el presidente firma el finiquito, se establece una fecha de entrega y la institución se queda con una copia del documento; sin embargo, nada de esto se cumplió en el caso Funes, y posiblemente, en otros casos que aún no han salido a la luz.
Ante las irregularidades, el presidente Valiente, afirmó que su equipo jurídico analiza poner un aviso a la Fiscalía General de la República (FGR) para que se investigue el posible cometimiento de hechos delictivos; no obstante, no detalló si concretará alguna acción legal al respecto.