Una mujer identificada como Wendy Beatriz Orellana, de 21 años de edad, fue detenida este domingo en horas de la tarde al interior de la terminal de buses de oriente, en San Salvador, cuando llevaba en su poder dos granadas fragmentarias, las cuales llevaba ocultas en un bolso de mano.
De acuerdo con el reporte policial, la mujer ingresó a la terminal de buses con un niño en brazos de aproximadamente seis meses y una cartera de mano en la cual llevaba las dos granadas M-26 y M-67, ambas de fabricación industrial.
Un grupo de agentes de la División Antinarcóticos (DAN) de la Policía Nacional Civil (PNC) que se encontraba en el lugar vio a la mujer con aspecto sospechoso y le dictó comandos verbales para que se detuviera. Posteriormente la registraron, encontrándole los ilícitos que, según la policía, iban a ser usados para realizar ataques contra la institución policial.
Información preliminar de las autoridades indica que la mujer provenía de El Palmar, en Santa Ana, y se dirigía hacia San Miguel.