En una primera reacción a la protesta de policías efectuada una semana atrás, el presidente Salvador Sánchez Cerén expresó que procesará disciplinariamente a los elementos policiales que “desprestigien a la PNC”.
“Llamo a nuestros policías a mantener en alto el nombre de la PNC”, dijo el gobernante, quien criticó que “no era posible como pocos elementos pongan en mal la confianza” de la institución policial.
Más temprano y durante una entrevista televisiva, el vicepresidente Oscar Ortiz calificó la movilización de policías del miércoles pasado como “una insubordinación”, pero reconoció que las demandas de los manifestantes eran legítimas.
Lea también: Oscar Ortiz sobre protesta de policías: “Fue un acto de insubordinación”
Dicha movilización llegó hasta las puertas de Casa Presidencial, no sin antes romper el habitual cerco de agentes de la Unidad de Mantenimiento del Orden que se aposta a la altura de CIFCO. Los manifestantes exigieron al gobierno el cumplimiento de un bono para cada agente, prometido desde 2015.
Sánchez Cerén reiteró que los policías recibirán su bono antes que concluya el primer trimestre de 2016, el cual provendrá de los recursos recaudados por el impuesto a los servicios de comunicación, en vigencia desde diciembre pasado.
Las declaraciones fueron vertidas durante el cambio oficial de mando de la PNC, en la que Howard Augusto Cotto recibió el mando como nuevo director de la entidad policial.
En ese contexto, el presidente anunció que enbreve se entregará a la Asamblea Legislativa la propuesta para un préstamo por 100 millones de dólares para hacer mejoras en la PNC, el cual es financiado por el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE).