El Salvador
domingo 24 de noviembre de 2024

Nicaragüense violaba y prostituía a su hermana por $10 en El Salvador

por Redacción


Durante varios meses, la joven vivió humillaciones y malos tratos. Callaba. No decía nada porque temía que su hermano le hiciera más daño.

Ella era su hermana, pero la prostituía. La obligaba a tener relaciones sexuales con diferentes hombres. Todo comenzó a principio de enero de 2014, cuando Rodrigo Hernández y Carla Patricia Pastrana se vinieron a vivir a El Salvador. Ambos son nicaragüenses. Se radicaron en San Miguel.

Rodrigo se trajo a su hermana, quien en ese entonces tenía 14 años de edad, y aceptó que viviera con ellos. Pero, al cabo de unos días, la comenzó a tratar mal. La abusó sexualmente en varias ocasiones y después la obligó a prostituirse.

Durante varios meses, la joven vivió humillaciones y malos tratos. Callaba. No decía nada porque temía que su hermano le hiciera más daño. La compañera de vida de Rodrigo se enteró de lo que ocurría, pero no hizo nada para evitar el maltrato al que era sometida su cuñada. Avaló la actitud de su compañero.

También esta obligó a la adolescente a vender su cuerpo. Con el dinero que ahorraron se fueron a vivir al centro de San Salvador. En su nueva casa las cosas no fueron muy diferentes. La joven siguió siendo prostituida.

Su hermano la llevaba a parques y la entregaba a hombres que le pagaban 10 o 20 dólares para tener relaciones sexuales con ella.  Meses después se regresaron a vivir al oriente del país. Esta vez se radicaron en el municipio de Pasaquina, departamento de La Unión.

En una ocasión, la víctima logró huir de su vivienda y se dirigió al parque central de Pasaquina. Ahí se encontró con unos agentes de la Policía Nacional Civil (PNC) y les pidió ayuda. Les relató todo lo que le habían hecho con ella.

La Policía trasladó el caso a la Fiscalía General de la República (FGR) y estos iniciaron una investigación que acabó con la captura de la pareja.

Rodrigo Hernández y  Carla Patricia Pastrana Leiva fueron condenados por el Tribunal de Sentencia de La Unión (el primero a 22 años de prisión y la segunda a ocho) por los delitos de trata de personas y violación en menor o incapaz.