Entre las cinco designaciones de gabinete efectuadas este viernes por el presidente Salvador Sánchez Cerén destacan indudablemente la de Mauricio Ramírez Landaverde y Howard Cotto como ministro de Seguridad y director de la PNC, respectivamente.
Tanto Landaverde como Cotto asumen la conducción del problema de seguridad, el más agobiante para el salvadoreño de acuerdo con las encuestas de opinión. Ambos dieron un gran salto en sus carreras policiales cuando fueron nombrados, respectivamente, como subdirector general y subdirector de investigaciones durante el gobierno de Mauricio Funes (2009-2014).
Asimismo comparten el hecho de haber sido combatientes guerrilleros durante los años 80 y de formar parte de las primeras generaciones de ex insurgentes que conformaron la PNC.
De la misma forma y en algún punto de sus carreras, ambos fueron jefes de la delegación de la PNC en Cabañas.
En el caso de Landaverde, también es fundador de la Asociación Cooperativa de Ahorro y Crédito de la Policía Nacional Civil (PNC).
Entre otros cargos, ha fungido como jefe de la Unidad de Investigación Disciplinaria de la Policía y jefe de las regiones Oriental y Paracentral. A lo largo del mandato del presidente Mauricio Funes, se desempeñó como subdirector general de la PNC.
Durante su presentación como nuevo ministro de Seguridad, Ramírez Landaverde dijo que aprecia el apoyo que la Fuerza Armada brinda a la seguridad pública, y aseguró que trabajará para garantizar que los tribunales disciplinarios contra los malos elementos de la Policía funcionen.
Por su parte, el nuevo director general de la PNC, Howard Cotto, nació en San Salvador, el 3 de diciembre de 1965, siendo hijo del pastor bautista de origen guatemalteco Augusto Cotto, quien en los años 70 se incorporó a la Resistencia Nacional (RN), la más pequeña de las organizaciones que integraban la guerrilla del FMLN.
En su juventud, Cotto decidió seguir los pasos de su padre e incorporarse como combatiente de la RN. Luego de terminada la guerra, es designado para una comisión de ex combatientes que integrarán la Policía Nacional Civil, a la cual ingresa en su segunda promoción.
A lo largo de más de 20 años de carrera policial ha desarrollado diversos cursos sobre seguridad pública en países como España, Chile y Estados Unidos. Es, además, fluido en el idioma inglés.
Con la llegada del FMLN al Ejecutivo en 2009, Cotto es transferido de la jefatura de la Región Central de la PNC a la subdirección de Investigaciones. Durante la presidencia de Mauricio Funes también ocupó la subdirección de Seguridad Pública y la Dirección Ejecutiva de la Comisión Nacional Antidrogas.
Además de los dos funcionarios mencionados, el presidente Sánchez Cerén designó a Luis Roberto Flores Hidalgo como nuevo viceministro de Seguridad, cargo desde el cual, entre otras cosas, se encargará de supervisar los proyectos de rehabilitación y reinserción de personas que tuvieron conflictos con la Ley.
Al igual que Ramírez Landaverde y Cotto, Flores Hidalgo se integró a la PNC desde sus inicios y tiene a su cuenta el ser uno de los fundadores de la antigua unidad de emergencias 121 que funcionaba en el área metropolitana de San Salvador.
El mayor grado que alcanzó al interior de la PNC es el de subcomisionado y entre otras cosas fungió como jefe del Cuerpo de Agentes Metropolitanos de San Salvador, durante la gestión de Carlos Rivas Zamora (2003-2006).
El último cargo que desempeñó Flores Hidalgo antes del Viceministerio de Seguridad fue el de asesor del exministro Benito Lara.