Una niña de cinco años que resultó quemada tras manipular una “estrellita” en San Miguel murió a tempranas horas de este miércoles, después de permanecer 13 días en la Unidad de Cuidados Intensivos del hospital de niños Benjamín Bloom, según informó el director de Protección Civil, Jorge Meléndez.
El doctor Álvaro Hugo Salgado, director del hospital, señaló este 25 de diciembre que la niña se encontraba jugando con el pirotécnico y lo lanzó hacia unos botes de basura donde había trapos con solvente para pintura (thinner), lo que causó una llama que le quemó la mitad del cuerpo.
Estas declaraciones fueron dadas por Salgado en una conferencia de prensa para detallar resultados del plan “Belén”, desarrollado por varias instituciones del Estado en torno a la prevención y atención de emergencias en el periodo navideño.
Durante la misma conferencia, el doctor Salgado hizo un llamado para “que esto nos sirva para entender que no hay ningún pirotécnico seguro, y no vamos a descansar hasta que se prohíba por completo la venta de estos”, dijo Salgado.
El médico además recordó que a pesar de los daños que causa año con año el uso de estos productos en las vidas de los niños, no se ha logrado prohibir su venta por el derecho al trabajo que exigen los comerciantes de la época; sin embargo, él señaló que “no hay trabajo que valga la vida de un niño o la tristeza de quedar con esas cicatrices horribles”, dijo.