De enero a julio de 2015 en El Salvador han muerto 3,332 personas de forma violenta, según Miguel Fortín Magaña, director del Instituto de Medicina Legal (IML). El mes pasado el promedio diario fue de 15.5 asesinatos.
En todo el 2014 la autónoma registró 3,912 muertes violentas, es decir, 580 más que las acontecidas en los siete meses que han transcurrido del año en curso. Con un ritmo de 15.5 asesinatos diarios es probable que 2015 cierre como uno de los años más violentos desde la firma de los Acuerdos de Paz el 16 de enero de 1992.
En 2012 se contabilizaron 2,43 homicidios; en 2013, 2,492.
El ascenso de los crímenes ha sido sostenido desde el año pasado. Por ejemplo, en julio de 2012 hubo 175 homicidios; 2013, 253; 2014, 351; 2015, 467. En mayo las estadísticas se han movido de manera similar.
Este año también se ha incrementado el número de policías y militares muertos bajo el fuego de las pandillas. El año pasado se registraron 39 asesinados mientras en el año que transcurre la cifra ha aumentado a 41. Los homicidios solían ocurrir cuando los agentes estaban en sus días de descanso y sus atacantes los sorprendían desarmados; en los últimos meses, sin embargo, han sido enfrentamientos o ataques con tácticas similares a las que ocupaba la insurgencia en los primeros años de la Guerra Civil en los 80.
También han aumentado los asesinatos múltiples. En 2014 las pandillas perpetraron 45 mientras en 2015 ya llegó a 58. En San Pedro Perulapán, por ejemplo, esta semana un comando de pandillas asesinó a un ciudadano estadounidense, una niña de ocho meses, a su madre; en la misma localidad asesinaron a una niña de ocho años, dos mayores de edad e hirieron a ocho personas que estaban en una fiesta.