Ramón Atilio Centeno, de 75 años, falleció la madrugada de este lunes cuando se encontraba en la vela de su hijo que fue asesinado por pandilleros de la MS, el domingo, en el cantón La Presa de Usulután.
“Tuvo una fuerte impresión. No pudo soportar la muerte de su hijo y desde temprano en la vela se sintió mal. Tenía dolor en el pecho, por lo que se fue a dormir a una habitación. En horas de la madrugada lo encontraron sin vida, había muerto en la cama. Dijeron que la muerte de su hijo le provocó un infarto”, comentó un familiar.
Arturo Centeno, de 54 años, fue ejecutado por pandilleros en momentos que ordeñaba unas vacas de su propiedad. Los asesinos lo rociaron de balas con escopeta calibre 12 milímetros. Los pandilleros también sacrificaron a la vaca de la víctima.
Centeno hijo, era el director del Centro escolar La Esperanza, del municipio de Jiquilisco, departamento de Usulután. De momento, no se reportan capturas por el hecho. Las autoridades policiales manejan el caso con hermetismo.
El asesinato ha causado conmoción y muestras de repudio de los residentes del lugar y de la comunidad educativa de Jiquilisco.