El ministro de Seguridad parecía indignado. Subió al pódium y leyó un discurso mecánico que, poco a poco, fue tomando intensidad. El cierre lo hizo con un tono efusivo, claro y preciso. Tanto, que el fiscal general y el comisionado para la seguridad le dieron un apretón de mano en señal de elogio.
“Surge una carta – expresó Benito Lara – y que rápido apartamos el gran esfuerzo que hacen nuestras instituciones. Le damos más credibilidad a una carta que a los resultados que están habiendo. No puede ser. Este gobierno planteó que íbamos a entrar a una etapa de combatir con firmeza la delincuencia en este país, y esa decisión se mantiene. Yo creo que no podemos jugar, ni poner en duda, ni echar al traste la vida de los que están enfrentándose directamente y combatiendo la delincuencia. Eso es ofensivo para nuestras instituciones y para nuestros policías y soldados que ofrecen sus vidas para darnos seguridad a todos los salvadoreños”.
Las declaraciones las brindó en el lanzamiento del plan “El Salvador Seguro” en el municipio de Ciudad Delgado, San Salvador. En la tarima estaban los integrantes del Consejo Nacional de Seguridad Ciudadana, estudiantes de básica y líderes comunales de referido municipio.
“Es grande el esfuerzo que están haciendo las instituciones del Estado por combatir la inseguridad en este país. Incluso, a costa de las vidas de muchos soldados, fiscales y policías que está tratando de llevar paz y tranquilidad a la gente”, reiteró.
Al final del evento, el funcionario aseguró que la carta (firmada por cabecillas de pandillas) era pública, pero que no ha llegado al Consejo de Seguridad y mucho menos a manos del Gobierno.
«La carta ahí está, es pública, pero al Consejo no ha llegado. La reflexión que yo hago es que muchos, incluso, han planteado que la reducción tiene que ver con la carta. Eso es un menosprecio al esfuerzo y labor que hacen nuestras instituciones”.
Este miércoles trascendió una carta que fue enviada por pandilleros al Consejo de Seguridad en la que solicitan se les incluya en una mesa de diálogo a fin de reducir los índices de criminalidad en el país.
Estadísticas oficiales revelan que el pasado mes de junio se cometieron 667 homicidios en todo el territorio nacional (el más violento de la década). En mayo se contabilizaron 635, una cifra que también batió récord. En los últimos días hubo una leve reducción de asesinatos e iniciaron una serie de especulaciones sobre un nuevo acuerdo con pandillas que, de momento, el Gobierno lo descarta.
En su intervención, Lara no dejó de lado el tema de cómo sumar más recursos económicos para financiar la seguridad en el país. “Algunos dicen que tenemos recursos. Yo quiero decirles que los recursos que tenemos son producto de algunos préstamos y ya tienen nombre y apellido. Es decir, ya tienen proyectos concretos que tenemos que realizar”.
El ministro también subrayó que la estrategia que han implementado no tiene nada que ver con el manodurismo utilizado por gobiernos anteriores.
“Este plan no se trata de una Mano Dura, porque todos sabemos el historial de la mano dura en el país y en otros países que no han resuelto nada, y que han complicado el fenómeno de la inseguridad. Lo han hecho mucho más complejo”.
El plan El Salvador Seguro es la estrategia del gobierno del presidente Salvador Sánchez Cerén en el combate a la inseguridad. Fue dada a conocer a mediados de enero pasado en un evento realizado en Casa Presidencial. Este jueves fue puesta (en Ciudad Delgado) la primera piedra de este plan gubernamental.