Las pandillas de El Salvador están migrando no solo a Honduras y Guatemala sino también a Nicaragua a través del Golfo de Fonseca, dio a conocer Pedro González, subdirector Antipandillas de la Policía Nacional Civil (PNC).
Las pandillas, aseguró González, migran para escapar a la presión de las autoridades. Hasta la fecha lo más común es que se escondan de la persecución policial en los municipios donde sus compañeros de clica estén mejor afianzados y puedan darles seguridad.
Explicó, a modo de ejemplo, que ahora en la madrugada realizaron operativos en Zaragoza, La Libertad, donde capturaron a unos 25 pandilleros; dos eran buscados en otras localidades por haber cometidos delitos.
“Si algo podemos decir es que los salvadoreños estamos unidos en un sentimiento contra las pandillas”, dijo en la entrevista de Radio 102.9. Agregó, además, que las acusaciones que la Fiscalía General (FGR) presentará contra los detenidos están bien sustentadas. “Debemos seguirnos uniendo para que quienes toman decisiones vean el sentimiento en común que tenemos”.
González contó que los cabecillas del Barrio 18 y la Mara Salvatrucha viajan fuera del país, se hospedan en buenos hoteles con el dinero de las extorsiones y los robos mientras al resto de pandilleros, es decir, los que cometen los delitos, viven en condiciones precarias y se arriesgan para terminar en la cama de un hospital, la cárcel o en el cementerio.
“Esa no es la opción, mejor renuncien”, recomendó el jefe policial.
El subdirector antipandillas negó que la población desconfíe de los policías sino que a veces prefiere no denunciar por temor a las represalias de la pandilla. “La PNC no mata a la población sino que lo hace la pandilla”, concluyó.
En otro tema González consideró que los batallones de limpieza de la Fuerza Armada y la PNC están desarrollando un trabajo óptimo que ha contribuido a recuperar territorios que estaban sitiados por la delincuencia. Explicó que solo funcionan en casos previamente analizados, es decir, no está a tiempo completo.