Un niño de 14 años identificado como Cruz R. se suicidó este día, en el barrio La Vega, del municipio de de Rosario de Mora, departamento de San Salvador, tras el asesinato de su primo y un amigo perpetrado por pandilleros que operan en la zona el pasado jueves.
El hecho ocurrió mientras los restos de su primo y su amigo estaban siendo enterrados en el cementerio general de Rosario de Mora.
Al llegar a la vivienda, luego del sepelio, los familiares encontraron un detalle en una mesa: una rosa sobre una hoja de papel en donde estaba escrito un mensaje, explicando los motivos por los cuales había tomado esa decisión.
Una fuente cercana a la investigación reveló algunos fragmentos de la carta de despedida que dejó el menor dirigida a su familia, donde no solo pedía perdón por lo que iba a cometer sino también agradecía a su madre el haberle dado la vida y también manifestó su deseo de ser enterrado junto a su primo. Entre ellos, identificó las siguientes frases:
“De Cruz para mi familia”, “muchas gracias mamita por haberme traído a la vida”, “perdónenme por lo que voy a hacer pero lo hago para reunirme con Marlon”, “los quiero mucho”, “quiero que me entierren a la par de mi primo Marlon”, “perdóneme mamita”, “mamita, le agradezco por haberme traído al mundo”, “en el cielo los voy a esperar”.
Al final de la nota estaba decorada con dibujos representando a una familia agarrados de sus manos, con las palabras “papá, mamá, hermanita y Cruz”, reveló la fuente policial.
“El jovencito se impresionó al enterarse que el día jueves por la tarde, un grupo de pandilleros habían asesinado a su primo y a un amigo de la iglesia en la que se congregaban“, aseguró un miembro de la PNC que fue consultado.
“Cuando los familiares regresaron del cementerio, de enterrar a los jóvenes masacrados, encontraron al niño colgado de un árbol, inmediatamente lo intentaron auxiliar, pero desafortunadamente ya había fallecido”, agregó la fuente
Un familiar explicó a los agentes de policía que llegaron a verificar el hecho que el niño decidió quitarse la vida ante el impacto emocional que le causó el asesinato de un primo y un amigo suyo.
La tarde del día jueves 3 de abril, un grupo de pandilleros de la pandilla 18 revolucionarios, asesinaron a dos jóvenes en las riberas del río El Jute, en el Barrio La Vega, municipio de Rosario de Mora, en San Salvador.
Las víctimas fueron dos jóvenes identificados como Edwin Acevedo, de 24 años, y Marlon Andrés Miguel, de 19. Ambos jóvenes estaban bañándose en el río, cuando fueron rodeados y privados de libertad por pandilleros armados con pistolas y escopetas. A fuerza de golpes y empujones, fueron llevados hasta la orilla del rió El Jute, en donde les descargaron sus armas de fuego
Los residentes aseguran que los asesinos provienen del cantón El Jutío, en donde se han asentado en las últimas semanas varios grupos de pandilleros de la 18 revolucionarios, que huyen de las autoridades. Estos serían originarios de otros departamentos, agregó una fuente policial.