La empresa costarricense de alimentos Jack’s proyecta trasladar en los próximos cinco años el 50% de su producción hacia Estados Unidos, El Salvador y Nicaragua.
En un comunicado de prensa, el presidente de la compañía, Andrés Ignacio Pozuelo, aseguró que Costa Rica dejó de ser atractivo y seguro para invertir, según una publicación del diario La Nación.
A su juicio, los altos costos de las materias primas y la energía, lo obligaron a migrar hacia otros países.
El empresario también afirmó que “hay una fuerte voracidad fiscal, lo cual se manifiesta en proyectos de ley que obligan a las empresas a entregar información y aumentar pagos en impuestos”.
En esas condiciones, añadió, las empresas de capital local se están tratando como compañías de segunda clase y a las extranjeras como de primera clase.
Por ejemplo, Pozuelo dijo que que la producción de snacks de maíz resultaría un 25% más barata en El Salvador o Nicaragua. Mientras que las papas tostadas costarían un 30% menos en Estados Unidos y las galletas un 16% menos en Chile.
«Es una bola de nieve que ya comenzó a rodar, en donde los excesos regulatorios, los costos energéticos y la falta de acceso a materia prima, nos impide tener a Costa Rica en el radar y nos obliga a buscar nuevos horizontes para mantener nuestras operaciones», expresó el empresario.
En los últimos tres años, Jack’s ha trasladado el 15% de sus operaciones y en la actualidad emplea a 700 personas en el país.
Pozuelo formuló un llamado urgente al gobierno de Luis Guillermo Solís para «que trabaje en una verdadera estrategia energética que baje los costos para el sector industrial, que se elimine la voracidad fiscal para la industria nacional, que se deje de gastar en privilegios estatales y se comience a invertir en infraestructura».