El juzgado primero de Paz de Soyapango envió a prisión a Jenny B. Rivas y Samanta D. luego que la Fiscalía General de la República (FGR), las acusara del delito de homicidio agravado en grado de tentativa en contra de dos agentes policiales con clave Mateo y Juan.
De acuerdo a los hechos, explicados por el agente fiscal, el supuesto delito fue cometido cuando los agentes policiales llegaron a la colonia San Rafael, de Soyapango luego de ser alertados que en dicho lugar se estaba realizando un rito de iniciación para ingresar a una pandilla, no obstante al ingresar a la zona fueron recibidos con disparos de arma de fuego. En el intercambio resultó herida Samanta D. quien junto a Jenny B.R. y un menor de edad fueron detenidos y acusados del delito de homicidio agravado en grado de tentativa en contra de los dos agentes, con régimen de protección.
La parte defensora de Samanta, afirmó que la detención y la herida de bala que sufrió fue el resultado de una intervención equivocada de la PNC. La defensa presentó pruebas que hacen constar que la ahora acusada, es estudiante universitaria y que al momento de los hechos regresaba de realizar compras que tenían que ver con sus formación académica. Además el abogado defensor presentó una fotografía donde aparece él junto a su defendida realizando trabajo pastoral de una parroquia de la zona. Otro argumento al que se refirió la defensa para desestimar los argumentos de la FGR es que la PNC consignó que la inspección realizada en la escena del crimen la terminaron hasta el día 14 de enero debido a que el 13 de enero, día del ataque, ya había oscurecido y no era posible rastrear prueba tal como lo demostró la claridad del día siguiente cuando encontraron un arma de fuego con un cartucho en recámara y la señal de que con ella les dispararon. Lo mismo explicó la defensa de Jenny B.
Por su parte el menor de edad que fue capturado junto a las dos mujeres fue remitido a un juzgado de menores.
Al final de la audiencia, la jueza primero de paz consideró que existían los elementos mínimos para presumir que las acusadas pudieron haber participado en el hecho, y por ser un delito de naturaleza grave decidió mantener en detención a la dos, no obstante una de ellas, Samanta, se encuentra custodiada en un centro hospitalario debido a los impactos de bala recibidos en una de sus piernas el día de los hechos.