El ministro de Defensa, David Munguía Payés, justificó la exclusión de ascenso de dos coroneles que demandaron ante la Sala de lo Constitucional el no ascenso dentro de la Fuerza Armada de El Salvador (FAES).
“La ley de la carrera militar establece claramente que los militares, con el grado de coronel, podrán ser evaluados a partir de los cinco años. Esa decisión no la tomé yo, sin embargo tuvo efecto en mi administración. Es una decisión que tomó el ministro anterior con base a un asesoramiento legal de la Fuerza Armada y también del ministerio de la Defensa, esgrimió Payés.
Este jueves, dos coroneles en situación de retiro −Raúl Saravia y José Menéndez Urquilla− presentaron un amparo ante la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia por supuesta arbitrariedad del ministro de Defensa, David Munguía Payés.
El coronel Saravia dijo que violaron sus derechos constitucionales en el proceso de evaluación de ascenso a general de brigada, cometiéndose una serie de arbitrariedades. Esto pone de manifiesto el no cumplimiento de las leyes respectivas.
Los dos militares en situación de retiro, que pertenecen a la promoción 56 de las Fuerzas Armadas de El Salvador, señalaron que no se les permitió someterse al proceso de evaluación a través del cual podrían ser ascendidos a general de brigada.
Aseguraron que, por el contrario, se les pidió que solicitaran la baja.
La demanda fue presentada por el apoderado legal de los dos coroneles, Rodolfo Garay Pineda. El abogado detalló que se está reclamando a Payés dos omisiones graves en el desempeño de sus funciones.
Consideró que el ministro de la Defensa “estaba obligado a remitir la nómina de los coroneles que cumplen con los requisitos para ascender a general al Tribunal de Selección, y no la remitió. La ley obliga a convocar al Tribunal de Selección para que eligiera quiénes debían ascender y tampoco lo convocó.
Es por ello que no se dio ningún ascenso a general en la promoción 56, situación que nunca se había visto en la historia de la Fuerza Armada.
Coronel Raúl Saravia y abogado Rodolfo Garay Pineda. Foto D1.