Roberto “El Burro” Herrera se llevó las manos, sujetadas por unas esposas plateadas, a la frente y luego cerró los ojos. Subió los dedos índices como señalando el cielo. El silencio inundó la sala de audiencias por un momento. El juez acababa de absolverlo de los cargos por los cuales era procesado en ese tribunal.
Minutos antes, uno de los abogados defensores de Herrera se puso de pie y tomó un micrófono. El juez interrumpió su lectura del fallo y le preguntó si tenía alguna pregunta.
«Sí, mi señoría – respondió el jurista – no se pronunció en el caso veintiséis ni en contra ni a favor del señor Roberto Herrera».
El juez agradeció el recordatorio y luego leyó nuevamente. Manifestó a secas que el señor Herrera también era inocente del delito que se le imputaban en ese caso.
El abogado sonrió satisfecho y volvió la mirada hacia “El Burro” Herrara, frunció el ceño e hizo un movimiento brusco con las manos, como indicando que había sido liberado de todo cargo.
Fue entonces que Herrera hizo los gestos y movimientos antes descritos.
El fallo
Los imputados llegaron puntual a la audiencia. Eran las tres de la tarde de este viernes. Dos mujeres y 15 hombres entraron a la sala de audiencias y se sentaron para escuchar la resolución del juez.
En primera fila estaba Roberto Herrera, acusado de liderar una estructura dedicada al robo y hurto de vehículos. Estaba sereno, con una camisa roja manga larga contrastada por cuadros verdes.
No tuvieron que esperar mucho tiempo. El juez comenzó a leer la resolución del expediente judicial que documentaba 30 casos en los cuales se acusaba a los ahí presente de de robar vehículos y por agrupaciones ilícitas.
Herrera aparecía en siete casos. En todos fue absuelto porque los fiscales no pudieron probar ninguno delito que le imputaban.
El juez Especializado de Sentencia A condenó únicamente a 15 de los 17 imputados. Además de Herrera, absolvió a Karla Jessica Bolaños.
No obstante, ambos seguirán en prisión porque también enfrentan un proceso en el Juzgado Especializado de Instrucción A, donde se les acusa de formar parte del cártel de Texis, una estructura de crimen organizado que opera en el occidente del país.
Hugo Valiente, el abogado defensor de Herrera, indicó que las pruebas presentadas por la Fiscalía eran débiles. Según expuso, los señalamientos estaban basados en las declaraciones de un testigo criteriado que incriminaba a “El Burro”, pero que los relatos de las víctimas contradecían todo lo dicho por el criteriado.
“Hubo contradicciones desde el inicio del proceso. Así como ha sucedido en este caso, esperamos que suceda en los próximos venideros donde existen testigos que también han venido a decir mentiras en contra del señor Herrera”, manifestó Valiente.
Por su parte, los fiscales aseguraron que la investigación no fue un fracaso porque habían logrado condenas en contra de 15 de los imputados. Indicaron que revisarán el fallo y luego decidirán si apelan o no la decisión del juez.
El resto de los procesados fueron condenados a penas que oscilan entre seis y 132 años.
Al abandonar la sala de audiencias, Herrera manifestó a la prensa con una voz poco audible que se sentía satisfecho. ”Dios ha obrado”, reiteró en varias ocasiones.
El robo de carros
En los 30 casos documentados por la Fiscalía en la acusación destaca uno que detalla sobre el robo de un pick up a una persona que se encontraba estacionando su vehículo en las cercanías de la frontera la Chinamas, Ahuachapán.
En ese momento fue abordado por dos personas que le mostraron interés en comprar el vehículo, ya que tenía un rótulo de venta. Le preguntaron si podían probarlo.
La víctima aceptó y cuando iban en marcha los ladrones le pidieron que se bajara del vehículo porque se lo llevarían. Con un arma de fuego lo amenazaron a muerte y le quitan el teléfono celular.
Otro caso se describe como un robo en la Hacienda San José, en Santa Tecla. El hecho ocurrió la noche del 17 de abril de 2013, cuando Óscar Nelson Hernández había estacionado su vehículo en referido lugar para realizar compras en una tienda.
Cuando regresó se encontró con dos sujetos que portaban armas de fuego. Le pidieron que les entregara la cartera y el teléfono móvil.
Al final se llevaron 140 dólares, dos teléfonos celulares y el vehículo con su novia abordo. A ella la bajaron minutos después en el parque San José, del mismo municipio.
Roberto Herrera se persigna al salir del tribunal. Foto D1: Nelson Dueñas