Este 17 de octubre, Fe y Alegría cumplió 45 años de haber llegado a El Salvador para atender a niños, jóvenes y adultos de escasos recursos y en condiciones de vulnerabilidad.
“Los programas y proyectos que ejecuta la institución llegan a 18 escuelas públicas que brindan educación desde parvularia hasta noveno grado y en algunos hasta bachillerato. Además, atendemos tres centros especializados en educación no formal ubicados en Soyapango, Santa Ana y Usulután”, destaca la organización en un boletín alusivo a su aniversario.
Según se dijo, los estudiantes son capacitados en diferentes áreas técnicas con la intención de ayudarlos a crecer laboralmente y al mismo tiempo se capacita de forma constante a los docentes que los atienden.
“Además, se atiende a un Centro de Educación para Todos que pretende apoyar la formación integral de niños, niñas, jóvenes y mujeres del barrio marginal de Zacamil, poniendo especial énfasis en la atención de niñez en situación de riesgo social”, agrega la institución.
En números globales, Fe y Alegría asegura haber beneficiado a 14,900 salvadoreños y salvadoreñas.
“Se brinda procesos de acompañamiento integral a personas y comunidades en sus necesidades prácticas y estratégicas, fomentando el crecimiento y la mejora en sus condiciones de vida, sus dimensiones y ante situaciones de injusticia y necesidades concretas, se compromete en su superación y, desde allí, en la construcción de una sociedad justa, fraterna y democrática”, se dijo.