La guerra por callar el canal 11 de televisión, obligar a inversionistas a operar desde el antiguo 37 y, a la vez, no impedir que se cierre el paso a una nueva subasta de frecuencias de TV, apenas arranca. Ahora muestra nuevos actores.
Sorpresivamente, la Universidad Centroamericana ¨José Simeón Cañas¨ (UCA), influyente centro de pensamiento, decidió terciar en el debate entre dueños tradicionales de las televisoras del país e inversionistas extranjeros que quieren crear nuevos medios.
En su último editorial, afirma que, utilizando presentadores de televisión, los medios tradicionales piden «juego limpio con las manos sucias» en asuntos de frecuencias de TV.
Según esta universidad, la denuncia de amaños y otras conductas de presentadores de televisión normalmente competidores y ahora unidos dio resultado porque la SIGET revocó que se traspasase el canal 11 a cambio del 37 que hasta hace poco fue de la universidad Francisco Gavidia.
La campaña de los medios tradicionales carece de legimitidad y autenticidad. Cree que los presentadores no son los verdaderos dueños de los canales de televisión, asegura.
Pero también alega esa universidad que si algo ha caracterizado a algunos medios es amañar las leyes para tener privilegios.
«La actual ley de telecomunicaciones fue hecha precisamente a la medida de los medios que patrocinaron esta campaña. Las frecuencias se conceden de manera prácticamente vitalicia, se da libertad para fragmentarlas del modo que le convenga al empresario, solo se reconoce la subasta económica como mecanismo para acceder a las frecuencias, etc», dice la UCA.
Incluso, la universidad manifiesta que en épocas se han dado frecuencias hasta a supuestos lavadores de dinero.
En una forma casi de regaño advierte que «hay que defender la causa de la democracia y del juego limpio, pero debe hacerse con las manos limpias».
Decisiones
La sorpresiva aparición de la UCA en el debate por las frecuencias de la televisión se produce cuando los dueños de las televisoras tradicionales presionan al gobierno para que apaguen las señales de prueba de canal 11, sobre todo porque dos miembros del consejo de directores consideran que el trasladado de la frecuencia del canal 37 al 11 fue ilegal y violó leyes de igualdad y transparencia.
Pero, existió un voto disidente del director de la SIGET: Alfonso Waldemar Saravia Mendoza, quien considera que la resolución de esa institución que concedió el canal 11 a inversionistas extranjeros estaba firme y no podía trastocarse.
Eso hizo trascender que abogados de los inversionistas de canal 11 acudirán a otras instancias legales para tratar de hacer valer sus derechos.
Entre esos caminos cabría la posibilidad de que quienes luchan contra los medios tradicionales busquen suspender, en el entretanto, la reciente resolución de la SIGET y abran un largo camino y nuevo camino para contender, a corto plazo.
Entonces, lo que veremos es que, a cortísimo plazo, los dueños de las televisoras tradicionales colocarán sus apuestas en cerrar las transmisiones del canal 11.
Sus contendores harán hasta lo imposible para que los tribunales suspendan suspendan los efectos de la decisión del SIGET. Esto podría ocurrir mientras debaten el fondo del pleito.