Los tres hombres vestían uniformes y botas de uso militar. En sus manos cargaban fusiles M-16. Caminaban lentamente en la misma dirección. Casi juntos. No cruzaban palabra ni se miraban entre sí.
No eran militares. Eran ladrones disfrazados de soldados que habían planeado asaltar un bar ubicado sobre el bulevar Los Héroes, en San Salvador.
Los tres hombres entraron al bar. Uno de ellos se puso un gorro navarone en el rostro y exigió a los empleados que depositaran todo el dinero en un bolsón. Otro de los asaltantes se quedó vigilando en la entrada del local.
Luego de quitar las pertenencias a los trabajadores, los tres hombres abandonaron el lugar sigilosamente. El último en salir cerró la puerta corrediza lentamente. Era la madrugada del pasado 7 de agosto.
Pero los ladrones no contaban con que el asalto fue captado por cámaras de vigilancia ubicadas en ese lugar. Los propietarios del “Club Bar Fuego” informaron que los ladrones se habían llevado 500 dólares, dos escopetas y un arma corta que pertenecía a los vigilantes.
Caso II
La lluvia caía con fuerza sobre la capital. Eran cerca de las nueve de la noche del pasado sábado cuando cinco hombres (tres de ellos vestidos como militares y dos como policías) irrumpieron un restaurante de comida china, ubicado en el pasaje Lamatepec de la colonia Miramonte, en San Salvador.
Los supuestos soldados portaban armas de guerra. Neutralizaron al vigilante, a quien le quitaron su arma, y luego procedieron a robar el dinero de la caja registradora de donde extrajeron 600 dólares en efectivo.
A los clientes también les robaron sus pertenencias. Nadie se opuso y por ello no hubo personas lesionadas. Los asaltantes se largaron sin ninguna prisa.
La Policía estima, de acuerdo con las denuncias, que los sujetos robaron más de $2,000. También se llevaron el arma del vigilante al igual como lo hicieron cuando asaltaron el bar.
Estos hechos delictivos han generado zozobra entre algunos comerciantes capitalinos, quienes temen ser las próximas víctimas de esta estructura que ha comenzado a irrumpir y asaltar negocios en San Salvador.
Podrían ser exmilitares
Este es el segundo caso, en menos de 15 días, en donde ladrones se disfrazan de soldados para perpetrar sus asaltos en comercios de San Salvador. La forma de operar es la misma.
Las autoridades policiales aseguraron este lunes estar investigando a esta estructura que utiliza uniformes del ejército y de la policía. Sin embargo, de momento no se reportan capturas.
“Estamos ante la operatividad de estructuras delincuenciales que están adoptando esta especialidad delictiva. Que nadie tenga dudas que vamos a resolver y capturar a los que integran esta estructura”, manifestó el director de la Policía Nacional Civil (PNC), Mauricio Ramírez Landaverde.
Un investigador de la Policía que está llevando el caso, y que pidió omitir su nombre, comentó que “a simple vista” se puede detectar que los sujetos que asaltaron ambos lugares tienen formación militar.
“No sabría decirle si antes tuvieron formación militar o todavía están activos. Pero no se ve que estén fuera de forma. La manera de tomar el arma y la forma de caminar indican que tienen formación militar”, manifestó.
El presidente Salvador Sánchez Ceren, por su parte, al ser consultado sobre el mismo caso se limitó a responder que las autoridades están investigando y que “yo no puedo hablar con base a especulaciones”.
No obstante, el mandatario recordó que “el ministro de Defensa (David Munguía Payés) ha sido claro que no hay vinculación de ninguna unidad de la Fuerza Armada con estas acciones”.
El pasado 8 de agosto, un día después que asaltaran el bar, Munguía Payés aseguró ante los medios de comunicación que se encontraba investigando ese caso para determinar quiénes estaban cometiendo los hechos delictivos.
“En ningún momento efectivos militares han estado involucrados en este tipo de actos, es gente que se disfraza para cometer fechorías”, aseguró.
No obstante, en ambos casos, las pesquisas policiales apuntan a que podría tratarse de una estructura compuesta por exelementos de la Fuerza Armada.
“Es interesante notar que de momento sólo han asaltado a sus víctimas. No han matado ni lesionado a nadie”, señaló el investigador, quien a la vez dijo que la Policía está preparada para enfrentarse con ellos.