Cancillería, a través de un comunicado, informó que ha decidido reorientar fondos propios para cumplir con la investidura presidencial que deberá realizarse el 1 de junio de este año. Esta medida, coordinada entre el Ministerio de Hacienda y el gobierno entrante, surge a partir de la disposición de la Sala de lo Constitucional de suspender las transferencias de fondos para toma de posesión.
Además, agrega el comunicado que a pesar de que el Ministerio de Relaciones Exteriores no ha recibido una notificación oficial sobre la disposición de la Sala, Cancillería ha procedido a congelar la cuenta cuyos fondos ya habían sido transferidos por el Ministerio de Hacienda a esta cartera. Una parte de estos fondos ya fue ejecutada y otra parte ya había sido comprometida, agrega el documento.
Asimismo, asegura que el evento de traspaso de mando presidencial se realizará tal como se había planificado, cumpliendo con los estándares de calidad y transparencia.
Con anterioridad se habían estimado $1.4 millones para el traspaso de mando; sin embargo, el presidente electo Salvador Sánchez Cerén había pedido buscar ahorro, de tal suerte que se había logrado bajar a $1 millón el presupuesto destinado para este evento.