El ministro de Justicia y Seguridad, Ricardo Perdomo, se reunió este miércoles con los representantes de las iglesias católica, evangélica y anglicana como un primer acercamiento del diálogo para la pacificación nacional.
De acuerdo con el funcionario uno de los propósitos es establecer «un ruta y metodología» que permitan «acuerdos nacionales» sobre cómo superar los niveles de violencia en el país.
Perdomo aclaró que el diálogo cuenta con el visto bueno del Presidente saliente Mauricio Funes, así como de los nuevos gobernantes electos en marzo pasado.
«La comisión de diálogo esta definiendo cómo va a operar, donde el Gobierno es un facilitador respetuoso de esta comisión», añadió Perdomo, al tiempo de insistir en que se trata de un primer acercamiento debido a lo cual no existe una agenda temática definida ni fecha para un nuevo acercamiento, aunque sí el compromiso de seguir con el esfuerzo.
El ministro indicó que de forma paralela al diálogo por la pacificación nacional, su dependencia sigue ejecutando los planes de prevención y represión del delito, es decir, se sigue combatiendo a los grupos delincuenciales.
Sobre el tema, el obispo auxiliar de San Salvador Gregorio Rosa Chávez se refirió al acercamiento con Seguridad como una «reunión exploratoria» y desde ya han privilegiado el bienestar de la población por encima de cualquier otro interés.
«Partimos de escuchar a la gente y buscar fórmulas de solución a la violencia», expresó el obispo al final de la reunión.
Con estas últimas palabras, Rosa Chávez reafirmó la posición de la iglesia que se ha desmarcado por completo del proceso de tregua entre pandillas con la mediación de Raúl Mijango y el capellán castrense Fabio Colindres.
A la reunión, celebrada en las instalaciones del Ministerio de Seguridad, no fueron convocados Mijango ni Colindres y hasta el momento se ignora si ellos serán parte del proceso.
Orígenes
El proceso de diálogo fue anunciado por el ministro Perdomo y aclaró que «el gobierno facilitará el trabajo a estos actores dialogantes en el marco de la ley para que surja un acuerdo nacional para que sea aceptado por diferentes actores sociales».
Este proceso se diferencia de la anterior tregua entre pandillas porque, según el ministro, van a participar sectores más amplios de la sociedad civil. «Cada uno de estos grupos va a involucrarse desde sus capacidades», dijo
En el caso de las iglesias, Perdomo acotó que una de las iglesias evangélicas comprometidas en proceso de pacificación puso a disposición a cuatro mil pastores que trabajarán en el diálogo para la prevención de la violencia.
La iniciativa es apoyada por el presidente y vicepresidente electos. Ellos encomendaron al ministro que se continuara con este esfuerzo porque el objetivo es ofrecer una respuesta integral a la violencia que impera en el país.
En este marco de diálogo multisectorial las pandillas serían un actor más y ellos deben tomar la decisión de involucrarse o no.