Mirna del Carmen Gómez de Flores, exgerente del banco Hipotecario de San Miguel, que se apropió de una fortuna de ocho millones de dólares de una anciana, recibió un nuevo revés jurídico cuando, este martes, el Juzgado Primero de Sentencia de ese departamento le impuso una condena de ocho años de prisión y a pagar el dinero que había robado.
El mismo tribunal le ordena cancelar una responsabilidad civil, por uso de documentos públicos, de $75,742 dólares.
La representación fiscal la acusó por el delito de defraudación a la economía pública.
La exgerente tenía acceso a las cuentas de los clientes y logró detectar que la señora Marie Azucena Borg de McMillan, de 94 años, tenía una fortuna de ocho millones de dólares y que no tenía ningún familiar en San Miguel, por lo que se hizo amiga de la anciana y se comprometió en velar por su cuido personal.
Conforme se ganó la confianza de la anciana, la conminó a que le firmara algunos documentos con los cuales le estaría cediendo toda su fortuna.
La anciana era oriunda de los Estados Unidos y falleció de forma misteriosa en el 2006 ya que nadie da cuenta de las causas de su muerte ni de su velación, por lo que el caso comenzó a ser investigado por la denuncia de unos familiares.
Conforme avanzaron las investigaciones la Policía y la Fiscalía determinaron que la ex gerente no había actuado sola sino que recibió ayuda del abogado César Isaac Canales Fuentes y de Julio César Flores, su compañero de vida. También participaron las trabajadoras del banco Perla Maricela Saravia Henríquez y Gloria Patricia Machuca Telles, ambas prófugas de la justicia.
Mirna del Carmen Gómez de Flores fue detenido y procesada y el Juzgado Segundo de Sentencia la condenó a nueve años de cárcel y a pagar los ocho millones de dólares.
El juez desestimó acusarla por uso de documentos públicos y sus abogados no conforme con el veredicto decidieron acudir a la Cámara Primera de la Sección de Oriente y está anuló la sentencia, por lo que ordenó un nuevo juicio.
Con el nuevo proceso, la imputada no solo tendrá que purgar la condena y devolver lo robado, sino pagar en concepto de responsabilidad civil.