El ministro de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN), Herman Rosa Chávez, recomendó este domingo que se inicien las actividades de limpieza de las cenizas que expulsó el volcán Chaparrastique para reducir los riesgos a la salud de las familias que están dentro y fuera de la zona más crítica.
El funcionario dio estos lineamientos luego de una reunión con técnicos de la Dirección de Desechos Sólidos se reunieron con la Comisión Departamental del Protección Civil en el Municipio de San Jorge, en el departamento de San Miguel.
Los análisis realizados por técnicos de MARN sobre muestras de cenizas volcánicas procedentes de dicho evento eruptivo han determinado que estas no presentan concentraciones de metales pesados que pudieran amenazar la salud de la población. Sin embargo, pueden causar problemas de salud dado que la composición de las mismas incluye partículas finas menores de 2 micras, las cuales pueden ser re-suspendidas o movilizadas tanto por las personas como por los vehículos y son fácilmente inhalables por el ser humano.
Es necesaria una inmediata remoción de dichas cenizas, las cuales no son consideradas como materiales peligrosos, por lo que su manejo se limita a su retiro de sitios donde representen riesgo potencial de entrar en contacto con la población y su disposición como desecho sólido común, agregó el ministro.
El MARN recomienda el enterramiento en trincheras comunes con su respectiva cobertura para prevenir que la acción del viento contribuya a su movilidad y trasporte a zonas pobladas.
Una de las primeras medidas contingenciales para prevenir daños a la salud es la limpieza de calles primarias y secundarias, las cuales se encuentran cubiertas de ceniza volcánica, ya que el paso de vehículos ocasiona que se levante el material particulado (ceniza volcánica). Este llega hasta las viviendas y las personas, poniendo en riesgo, la salud de las familias.
Respecto a la limpieza de calles y rutas, estas pueden ser de asfalto o tierra/ripio, y según el caso la tarea será distinta si las calles son de asfalto y si son de tierra.
Si son calles de asfalto, es importante rociar previamente con agua para evitar que se levante la ceniza muy fina (muy poca agua, de lo contrario se pegará en el piso como cemento). Se podrá barrer con escobillones formando una serie de montículos cada una serie de metros, según la cantidad de material. Luego con un camión (preparado con una lona para que en el trayecto al lugar de depositación no se vuele) ir cargando a pala las cenizas. Lo ideal es contar con mini-cargadores con cuchilla frontal para facilitar la tarea.
No es conveniente usar camiones barredores, debido a que el mismo levanta mucha polvareda (según la experiencia en la localidad de Esquel, Chubut, Argentina).
Si son calles de tierra, sugiere el MARN, Se deberá pasar una motoniveladora, tratando de profundizar más de lo normal y mezclar el material con la tierra. Siempre es mejor pasar antes un camión regador para que la maniobra no levante tanta ceniza fina.
Es importante que a los camiones y máquinas (minicargadoras, motoniveladora, etc.) se les realice el mantenimiento diario de filtros (sopleteado) y cambio de aceite y filtros semanalmente, para evitar la pérdida de los mismos con el tiempo.
Se debe tener cuidado de no obstruir los drenajes naturales, canaletas, cordón cunetas y otros drenajes de agua lluvias, de las calles a ser intervenidas.