El Salvador
miércoles 15 de enero de 2025

Disminuyen albergados del volcán Chaparrastique

por Napoleón Morales


Mientras tanto, las autoridades no han podido determinar que ha habido disminución de gases, debido a los vientos que se han generado por un frente frío, por eso, la alerta anaranjada continúa.

El director Regional de Protección Civil de San Miguel, Arturo Blanco, confirmó la tarde de este jueves, que el número de albergados producto de la explosión del volcán Chaparrastique, se ha reducido a 773.

Según el informante, se mantiene la alerta naranja y no se ha dado orden para que estas personas regresen a sus hogares porque existe la posibilidad de que el coloso haga una nueva erupción y por las intensas emanaciones de carbono y azufre, que pone en peligro la vida de los lugareños. Se prevé que del cráter emanan unas mil 500 toneladas diarias de gases.

“Las personas que han regresado a sus hogares lo han hecho por cuenta propia y lo único que ordenamos es que de día viajen a sus residencias para que verifiquen sus pertenencias y que regresen lo antes posible a los albergues que se han habilitado en San Miguel y Usulután”, detalló Blanco.

En los cinco municipios que han resultado afectados por la explosión, hay diseminados 600 elementos de seguridad, de ellos 400 son agentes de la Policía Nacional Civil y 200 elementos del Ejército Nacional. “Queremos garantizar las pertenencias de los lugareños y evitar los pillajes”, afirmó.

Aseguró además, que la alimentación de los 773 refugiados está asegurada para la presente semana y que ya están haciendo las gestiones para obtener el alimento de la próxima semana y mientras dure la emergencia.

“Como a la una de la tarde el Chaparrastique tuvo un comportamiento anormal y lanzó una columna de humo a dos kilómetros de distancia y luego llegó a su normalidad. Le damos seguimiento para que no nos agarre de sorpresa”, dijo el funcionario.

Por otra parte, descartó que Francisco Quintanilla, de 68 años de edad, y Herminia Moreira, de 80, hayan fallecido por la inhalación de gases procedentes del volcán, ya que uno de ellos padecía de insuficiencia renal crónica y de cáncer terminal. Ambos eran residentes del cantón Piedra Azul, de San Rafael Oriente, San Miguel.

En el informe número nueve del ministerio del Medio Ambiente y Recursos Naturales, se confirma la vibración entre 16 y 35 unidades en la estación Lacayo, manteniéndose ligeramente superior al día anterior.

En tanto la pluma de gases es continua y de moderada intensidad sin sobrepasar los 200 metros de altura y en varias ocasiones ha desaparecido momentáneamente. Debido a las condiciones actuales de dirección del viento, la pluma se desplaza con dirección a los municipios de San Jorge y San Rafael Oriente. Las poblaciones más cercanas al volcán no reportan caída de cenizas.

Las emisiones diarias de Dióxido de Azufre, (SO2) continúan elevadas. El promedio diario para el 29 de diciembre fue de 637 toneladas de Dióxido de Azufre, el día 30 alcanzó 1,244 toneladas; el día 31 fue de 2,200 toneladas; el 1 de enero de 2014 se registraron 1,740 toneladas y hasta las 10:00 am de este 2 enero, muestra un valor de 1,400 toneladas.

A las cinco de la tarde, el ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN) reportaba una disminución de emisión de toneladas de Dióxido de Azufre a 700.

Los vientos comenzaron a dificultar la medición de la emisión de gases del volcán Chaparrastique que el domingo hizo una erupción de ceniza, en el este de El Salvador, informó este jueves el ministro salvadoreño de Gobernación, Ernesto Zelayandía en Radio Nacional.

Por su parte el MARN  precisó que los vientos con ráfagas de hasta 35 km por hora son generados por un frente frío que se ubica desde La Florida hasta la península mexicana de Yucatán.

Zelayandía dijo, que en virtud de los vientos que desplazan los gases tóxicos, los expertos no pueden «determinar» si la tendencia de emanaciones desciende.

Los datos descritos de medición de gases implican un proceso de desgasificación que podría afectar paulatinamente a la vegetación, los cuerpos de agua superficiales y a la población de los alrededores del volcán.

Por lo tanto, se considera que se mantiene una situación de riesgo para la población que transita o habita en los alrededores del volcán de San Miguel, y no se descartan episodios eruptivos a través del cráter central o sus flancos.