El exministro de Economía Miguel Lacayo, se defendió este viernes de las acusaciones que se hacen en su contra, de ser el principal instigador para que se propiciara la venta de acciones de La Geo a la empresa italiana Enel Green power, en una supuesta negociación fraudulenta.
En una improvisada conferencia de prensa, Lacayo dijo ser un perseguido político por el ambiente electoral que impera en El Salvador, aunque descargó los dardos con el Presidente de la República Mauricio Funes, al argumentar: “al mandatario no le gusta lo que escribo en una columna de un rotativo nacional. Me acusan de un delito que no he cometido y este es el precio que pago por decir la verdad y ejercer la libertad de expresión”.
“Da la impresión que el gobierno persigue a sus adversarios políticos inocentes y honorables, solo porque piensan diferentes y dicen lo que piensan. Pese a ello, seguiré escribiendo y hablando en público, mientras tenga voz y la posibilidad de hacerlo”, sentenció el exministro de Economía.
“Seguiré luchando para que El Salvador sea un país libre, donde tengamos respeto y el Estado de derecho se aplique a todos por igual”, detalló Lacayo.
Se mantuvo muy firme en que es inocente y que únicamente es señalado en dos notas, donde se presume que se instiga a veinte personas para que firmaran la venta de acciones de La Geo.
Negó tajantemente que no tiene nada que ver con los señalamientos que se hacen en su contra: “todos mis actos fueron realizados en el marco legal y estoy interesado que se aclare de que soy inocente, por ello estoy muy tranquilo”, dijo el imputado.
Esta mañana se presentó al Juzgado Séptimo de Instrucción, para firmar el libro de asistencia y para entregar los 25 mil dólares de fianza que le impuso la titular del Juzgado Séptimo de Paz, por no presentarse a la intimación y mucho menos a la audiencia inicial.
El exfuncionario llego a las ocho de la mañana al Centro Judicial Isidro Menéndez y fue acompañado por su apoderado legal Arturo Muyshondt.