El ministro de Seguridad Pública ingeniero Ricardo Perdomo, aseguró este lunes que los mareros han atacado con armas de fuego en 114 ocasiones a miembros de la corporación policial en lo que va del año y que en muchos de los ataques, algunos agentes perdieron la vida y otros resultados heridos de gravedad.
Según el funcionario, la tendencia se debe a que los pandilleros están adquiriendo armas para aumentar su nivel de criminalidad y control territorial, aunque declinó revelar si las armas son largas o cortas, y si los delincuentes las adquieren en el plano local o provienen de países vecinos.
“La compra de armamento se debe a la confrontación interna que hay entre las pandillas “MS” y el barrio “18” y estamos investigando los orígenes de las armas. Sabemos que hay una actitud más beligerante de parte de los mareros en contra del personal policial y ello nos obliga a que doblemos las medidas de seguridad para salvaguardar la integridad de los efectivos de la PNC y queremos mandar un mensaje a estos delincuentes, que seremos más enérgicos en contra de ellos”, sentenció el ingeniero Perdomo.
Negó que los pandilleros tengan control territorial en algunos barrios y colonias de El Salvador, en referencia a que el fin de semana se dio a conocer, que en la colonia Montelimar, del municipio de Olocuilta, departamento de La Paz, los mareros cobraban quinientos dólares para permitir que los empleados de la distribuidora de energía DELSUR, restablecieran la electricidad.
“No se puede generalizar que los pandilleros tienen control de algunos puntos de El Salvador, solo porque se haya dado un hecho aislado en Montelimar. La población tiene que denunciar estos hechos para que la Policía Nacional Civil actúe de inmediato y reprimamos a los que se salen del marco legal”, detalló el ministro de Seguridad Pública.
Reveló además que en Lourdes, Colón, departamento de La Libertad, se ha localizado un cementerio clandestino donde podrían estar enterradas unas 17 personas, aunque no quiso incriminar a cuál pandilla se le atribuyen sus muertes, ya que las investigaciones recién inician.
Esta información se produce tras la graduación de 145 nuevos subinspectores y entre ellos 13 mujeres y 132 hombres, en el primer ascenso de sargentos sin título universitario a la categoría superior de la PNC.