El Salvador
miércoles 27 de noviembre de 2024
Nacionales

Condenan a dos pandilleros por asesinato de vigilante

por Napoleón Morales


La representación fiscal aportó los diferentes elementos probatorios con los cuales fundamentó la acusación, que detalló la actuación de cada uno al momento de asesinar a su víctima.

Dos pandilleros fueron condenados a 25 años de prisión por el asesinato de un agente de seguridad privado, que custodiaba a un vendedor de saldo de telefonía celular, hecho ocurrido en San Juan de Arena, cantón La Cabaña, de El Paisnal, departamento de San Salvador.

Ya era muy conocido en la zona y los clientes que visitaban les tenían estimación porque eran muy joviales. Pero el lunes 29 de abril del presente año, dos pandilleros les salieron al paso y trataron de asaltarlos, acción que quiso evitar José Fidel Sánchez Mendoza, de 37 años y le fue imposible, porque cayó abatido a tiros y los delincuentes siempre se llevaron una bolsa tipo canguro, donde el vendedor recolectaba todo el dinero.

Se dijo que los pandilleros Jhony William Rivera Girón, alias “Centavo” y Juan Carlos Morán Barraza, “Maseca”, llegaron en un carro y de inmediato atacaron a balazos al custodio, quien aún herido se enfrentó a tiros con los criminales. Antes de morir, el vigilante pudo herir a uno de los delincuentes.

La captura de los sujetos fue posible porque un testigo los ubicó en tiempo y lugar. Sus detenciones fueron administrativas a comienzos de junio, determinándose que ambos forman parte de una clica de la colonia Santa Gertrudis del municipio de San Martín.

La representación fiscal logró hacer la relación de los hechos y presentaron pruebas contundentes en el Tribunal de Sentencia de Santa Tecla, La Libertad, que llevó a la condena de 25 años de prisión por el delito de homicidio agravado en grado de coautores.

La representación fiscal aportó los diferentes elementos probatorios con los cuales fundamentó la acusación, en la cual se detalló la actuación de cada uno al momento de asesinar a su víctima.

Además, el testigo protegido con clave “Movical”, fue pieza fundamental porque narró el instante  en que se acercaron a Sánchez Mendoza, cómo le dieron muerte y hasta el momento que ambos abandonaron la escena del crimen.

Al concluir las intervenciones, el juzgador dio validez a la tesis de la FGR, y procedió a pronunciar el fallo condenatorio y la imposición de la pena de 25 años de cárcel.