lunes 28 de octubre del 2024

Caída vertiginosa del precio del café sigue golpeando a El Salvador

por Teresa Andrade


El exceso en la producción del café ha producido una caída en picada de los precios. Frente a la problemática, El Salvador tiene un reto grande para volverse cada vez más competitivo en un mercado que frena su crecimiento.

En los últimos meses, los precios internacionales del café han sufrido un derrumbe estrepitoso. Pasaron de cotizarse cerca de los $200 por quintal a principios de 2012, a cotizarse por debajo de los $130 por quinta en este año, según datos del Organización Internacional del Café (ICO, por sus siglas en inglés).

De igual forma, el café salvadoreño ha sufrido este embate y sobrellevar precios tan bajos le ha generado pocas ganancias en exportación anual. Para el caso, según datos del Consejo Salvadoreño del Café (CSC) para el ejercicio 2011/2012 el precio promedio que alcanzó en las exportaciones para el mes de octubre fue de $222.70; en cambio, para la cosecha 2012/2013 para el mismo mes el precio alcanzó un promedio de $154.50 el quintal.

Amy Ángel, especialista en economía agrícola de la Fundación Salvadoreña para el Desarrollo Económico y Social (FUSADES), afirma que esta crisis del precio internacional del café solo pude compararse con la ocurrida entre 1999-2003. “En ese momento, la caída fue más profunda y se mantuvo por más tiempo, se llegó a precios de $60 por quintal”, recordó.

La especialista determina que la crisis actual se debe a que hay mayor oferta que demanda en el mercado cafetalero. “El caso de Brasil está en su ciclo alto y es un buen año para ellos y luego tenemos a Colombia que ha hecho una recuperación notable. De igual forma, Vietnam ha sacado una producción mejor de lo esperado. Tenemos una muy buena producción, un consumo mundial que crece, pero no crece muy rápido. Entonces tenemos un excedente este año en la producción y por eso ha bajado tanto el precio”, explicó.

En este sentido, es difícil estimar que haya una pronta estabilización del precio o peor aún una sensible alza. Por el contrario, no muestra ningún tipo de mejora en este mes de octubre, primer mes del ejercicio cafetalero 2013/2014. Según datos del CSC, en este mes se registró un volumen de 48,896 quintales, siendo en su totalidad remanente de la cosecha 2012/13 con un total de ingresos de $5.49 millones. El precio promedio de venta fue de US$112.29 el quintal.

Pese a que lo exportado actualmente superó en 1,800 quintales, equivalente a un 3.9% el volumen en relación al año anterior, el valor del quintal disminuyó un 24.5%, lo que se traduce en unos $42 dólares menos por quintal.

Estrategia a largo plazo

Ángel recuerda que frente a la pasada crisis del precio del café ocurrida a principios de este siglo, se propusieron dos estrategias claras para que el sector cafetalero se volviera más competitivo y se colocara con fuerza en el mercado internacional.

La primera de ellas fue apostarle a la producción de cafés especiales para diferenciarse en el mercado. En aquel entonces, muchos productores se fueron por esa vía. Hoy en día, el 50% de la producción salvadoreña es de café especial.

La otra recomendación que se hizo fue mejorar la productividad y renovar el parque. Sin embargo, Ángel manifiesta que esta recomendación quedó sin atender.

“Para el caso del tema productivo no tuvimos un ímpetu tan fuerte, se requiere inversión, pero se requiere una institucionalidad fuerte a esos cambios, porque por un lado nosotros seguimos utilizando técnicas de cultivo de hace 50 años. La verdad se necesita un cambio de paradigma en la forma de producir y la renovación del cafetal definitivamente”, sentencia la especialista.

De igual forma, valora que uno de los pilares que puede hacer la diferencia es el Estado ya que puede ofrecer soluciones para el financiamiento que se requiere para apoyar al sector. “Por ejemplo en Colombia fue el Estado y dijeron bueno te voy a subsidiar para que cambies tus cafetales, porque ellos reconocen el impacto económico que tiene el sector en términos de los empleos que genera, en términos de las economías locales, en términos de las exportaciones”, manifestó.

Ángel asegura que las mismas medidas que se sugirieron hace 10 años están totalmente vigentes. “Tener cafés diferenciados, ya sea por su calidad o por su forma de producción, es decir producir café que tiene un costo por unidad menor del actual que le permita ser competitivo. Yo creo que esas son las dos soluciones que necesitamos”, concluyó.