Según una publicación del periódico guatemalteco Prensa Libre, una investigación del Programa Nacional Contra el Desarrollo Criminal de las Pandillas (PANDA) permitió determinar que Ismael Ernesto Alvarado Flores empleaba la guía telefónica para amedrentar a sus víctimas. Y que en un tan solo mes llegaron a 2 mil.
El informe policial detalla que Alvarado Flores recibió dinero correspondiente al 10% de las extorsiones que se lograron con las llamadas efectuadas. Se estimó que una de las víctimas pagó hasta Q300 mil (37 mil 648 dólares).
Paralelamente, la Fuerza de Tarea Contra Extorsiones desarrolló cinco allanamientos en Villa Nueva, en busca de más integrantes de este grupo criminal. Aún no se reportan capturas.
La detección de los extorsionistas se logró gracias a 30 denuncias, aunque se estima que hay más víctimas.
Según investigaciones, las extorsiones dejan a los delincuentes una ganancia mensual entre Q8 millones y Q10 millones (más de 1 millón de dólares).
Este es el segundo caso de llamadas excesivas hechas desde una cárcel, en julio pasado la Fiscalía Contra el Crimen Organizado determinó que un reo efectuó 400 llamadas en un solo día para extorsionar y comunicarse con los cobradores que trabajan para él.
Reportes policiales señalan que a diario en Guatemala se registran al menos 16 denuncias de extorsión, aunque existe un subregistro de víctimas.
Esta semana entró en vigencia en el país vecino la Ley de Equipos Terminales Móviles, la cual establece sanciones de hasta 10 años de prisión para los internos en centros de privación de libertad que ingresen alguna terminal móvil o componentes.