Más de cien cadáveres fueron encontrados en tres fosas clandestinas ubicadas en una zona rural. Hasta el momento ya fueron identificadas trece víctimas.
En la primera fosa fueron hallados un cuerpo cuya identidad se desconoce, un cráneo, cuatro segmentos anatómicos y 32 bolsas con cuerpos partidos.
En la segunda fosa ya fueron recuperados 25 cadáveres, una osamenta, cinco cráneos y diversos lotes de segmentos óseos.
En la tercera fueron encontrados 74 cuerpos de los cuales trece ya fueron identificados.
Las fosas están ubicadas en El Salto, Ixtlahuacán de los Membrillos y San Pedro Tlaquepaque en Jalisco, México.
Durante el gobierno de Andrés Manuel López Obrador han sido encontradas unas 1 mil 257 fosas clandestinas de las que fueron exhumados 1 mil 957 cadáveres.
De ese total ya fueron identificadas 806 personas y fueron devueltos a sus familiares 449.
La Fiscalía de México busca cadáveres pero no se da abasto o no tiene voluntad de recuperarlos. Por eso docenas de organizaciones de familiares están buscando por su cuenta a sus desaparecidos.
Sin mayores instrumentales técnicos las organizaciones ocupan todo lo que está a su alcance: una vara o el cuerpo.
Fernanda Nora, por ejemplo, desarrolló su olfato buscando a su hija desaparecida de 17 años. Y así fue como la encontró.
Los restos fueron encontrados en una fosa clandestina; Nora identificó la ropa interior de su hija, el pantalón, la blusa y una pulsera verde que siempre portaba en su brazo derecho.
Nora y 20 mujeres más han encontrado 50 cadáveres en los últimos dos años.
“Este año han crecido muchísimo las denuncias, son demasiadas; es un problema que no se quiere ver. Están desapareciendo mujeres, jóvenes con un futuro por delante y no tenemos idea del por qué, son personas que no andaban mal, que no hacían nada a nadie”, dijo a la prensa mexicana.