Una boda transmitida en vivo por redes sociales desde el primer minuto de este 26 de mayo, dio la bienvenida al matrimonio igualitario en Costa Rica, donde a partir de hoy es legal por orden de la Sala Constitucional y en acatamiento a una opinión consultiva de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
Ataviadas de blanco, Alexandra Quirós y Daritza Araya contrajeron matrimonio frente a una notaria en una ceremonia que fue trasmitida en redes sociales por la organización «Sí Acepto» y con pocos testigos presenciales como consecuencia de las medidas restrictivas de eventos masivos a causa de la pandemia del coronavirus (COVID-19).
La boda fue transmitida en redes sociales e incluso una televisora la compartió en su fanpage de Facebook.
Esta fue la primera ceremonia de matrimonio igualitario que se efectúa en Costa Rica tras su legalización, aunque otro medio centenar de estas uniones se encuentran desde hace semanas en el Registro Civil a la espera de que sean oficializadas a partir de este martes.
Este 26 de mayo se cumple el plazo de 18 meses que la Sala Constitucional dio al Congreso para que legislara sobre el matrimonio civil entre personas del mismo sexo, o de lo contrario quedarían derogados los artículos de las leyes que prohíben estas uniones.
El Congreso no tramitó ninguna ley al respecto y por lo tanto el matrimonio igualitario es legal desde este martes.
El fallo de la Sala Constitucional acató lo dispuesto por la CIDH en una opinión consultiva solicitada por Costa Rica y emitida en enero de 2018, en la cual afirma que los Estados deben garantizar los derechos de la población sexualmente diversa, entre estos la identidad de género y el matrimonio igualitario.
Costa Rica se convierte así en el primero de Centroamérica y el vigésimo noveno del mundo donde las personas del mismo sexo pueden casarse.
El presidente del país, Carlos Alvarado, abogó la noche del lunes en un mensaje en redes sociales por “una Costa Rica diversa, plural y unida, donde la empatía y el amor sean la brújula que nos permite salir adelante”.
La pandemia de la COVID-19 hizo que la población LGBTIQ no pudiera mantener actos masivos de celebración, pero sí hubo una trasmisión de tres horas de la televisión estatal en la que se recordaron las décadas de lucha por la igualdad de esta población y se festejó con un brindis la entrada en vigor del matrimonio igualitario.
Más bodas
Este martes se vivió una jornada histórica en la lucha por los derechos humanos en Costa Rica, lo que de inmediato está siendo aprovechado por las parejas que ya están dando el «sí acepto».
El activista y abogado Marco Castillo, y su pareja Rodrigo Campos, fueron los primeros en casarse en un Juzgado de Familia, como un acto de reivindicación con el cual se reafirma que estas dependencias están obligadas a efectuar los matrimonios entre personas del mismo sexo.
En el pequeño juzgado de la localidad de Desamparados, en el sector sur de San José, Castillo y Campos dieron el sí, se colocaron las sortijas y se besaron simbólicamente con sus mascarillas puestas para cumplir con las medidas preventivas por la pandemia del COVID-19.
«Él es un hombre que ha dado la cara por la lucha de la diversidad sexual y de muchas personas, con un corazón desinteresado. Es una persona maravillosa con quien Dios me ha permitido compartir la vida y comprometernos en una lucha que compartimos al ciento por ciento, que es nuestro proyecto de vida como compañeros, como familia, como compinches, como colegas», declaró Campos.