Un sismo de magnitud 5 seguido de tres réplicas de menor intensidad, sacudieron este viernes una zona fronteriza marítima entre Ecuador y Perú, sin que hasta el momento se haya informado de víctimas o daños materiales.
El Instituto Geofísico (IG) de la Escuela Politécnica Nacional de Ecuador informó de que el sismo principal ocurrió en una zona marina muy cercana a la costa, a unos 15 kilómetros de la ciudad ecuatoriana de Huaquillas situada en el límite internacional, a una profundidad de 51 kilómetros.
Este sismo ocurrió a las 09.16 hora local (14.16 GMT) y fue seguido por tres réplicas de magnitudes Richter 3,18, 3,23 y 2,37, respectivamente.
El Instituto Geofísico, en su portal web, indicó que tiene reportes de que el temblor fue sentido de forma leve en las provincias costeras de El Oro y Guayas, en la andina de Loja y en la amazónica de Zamora Chinchipe.
«No se descarta la posibilidad de que ocurran más» réplicas, señaló el IG en su informe, en el que asegura que actualmente efectúa una labor de monitoreo del fenómeno en la zona y que informará oportunamente sobre cualquier novedad que se presente.
Ecuador y Perú se encuentran situados en el Cinturón de Fuego del Pacífico, una amplia región que concentra algunas de las zonas de subducción (choque de placas tectónicas) más importantes del mundo y es escenario de una fuerte actividad sísmica.
Además de esos dos países andinos, el Cinturón de Fuego, que tiene forma de herradura, incluye en América a Chile, Argentina, Bolivia, Colombia, Panamá, Costa Rica, Nicaragua, El Salvador, Honduras, Guatemala, México, Estados Unidos y Canadá, así como otros de Asia y Oceanía.
Además, la zona fronteriza entre Ecuador y Perú está sometida a presiones por fallas geológicas que también generan movimientos telúricos.
En abril de 2016, la zona costera del norte de Ecuador fue sacudida por un terremoto de magnitud Richter 7,8, considerado uno de los más graves de la historia reciente del país y que afectó fundamentalmente a la provincia de Manabí y a su vecina de Esmeraldas (noroeste).
Ese fenómeno natural dejó más de 670 muertos, miles de afectados, así como millonarias pérdidas materiales.