La gran tormenta invernal que llegó este martes al noreste de Estados Unidos se llevó la vida de un joven de 20 años que chocó contra un poste eléctrico mientras conducía una moto de nieve en el municipio de Newberry, en el condado de York (Pensilvania).
«En el momento del accidente, el área central de Pensilvania estaba experimentando una multitud de condiciones relacionadas con el clima debido a una tormenta de invierno que causó árboles caídos, líneas eléctricas caídas y condiciones de viaje peligrosas en toda la zona», expresó la policía de Newberry en un comunicado.
Pensilvania, que vivió su mayor nevada en dos años, fue una de las zonas más afectadas por el temporal de hoy, y las autoridades notificaron que habían respondido a 1.200 accidentes relacionados con el clima, que además dejó a casi 140.000 personas sin electricidad.
Del mismo modo, en el estado de Nueva Jersey hubo más de 250 accidentes en la carretera, según el gobernador Phil Murphy.
La ciudad de Nueva York también vivió una nevada histórica, y en el icónico Central Park se acumularon más de 7 centímetros de nieve, poniendo fin a la ‘sequía’ en la ciudad, que no había pasado de los 5 centímetros de nieve en 744 días, desde el 29 de enero de 2022.
El alcalde Eric Adams recomendó a los neoyorquinos permanecer este martes en casa, aunque muchos aprovecharon la ocasión para pasear por la ciudad y disfrutar de la nieve, que parecía una escena de película.
Adams publicó un vídeo en su cuenta de X en el que mostraba una calle de Queens teñida de blanco y sin automóviles, después de que el Departamento de Gestión de Emergencias de Nueva York avisara este lunes de que la nieve produciría dificultades para viajar debido a una visibilidad limitada.
La tormenta obligó a cerrar todas las escuelas de la ciudad, pero los alumnos no pudieron disfrutar de su día de nieve y tuvieron clases en remoto; no obstante, un error en el sistema del Departamento de Educación les dio problemas para acceder a la plataforma Google Classroom.
En Boston (Masachussets) también se cerraron las escuelas, así como la mayoría de edificios públicos, como bibliotecas, oficinas municipales o centros comunitarios, mientras que en Filadelfia los colegios se mantuvieron abiertos pero las clases comenzaron con dos horas de retraso.
Por otro lado, la nevada se tradujo sobre todo en la cancelación de vuelos: las aerolíneas estadounidenses habían suspendido casi 1.500 este martes, de los cuales el 37 % despegaban del aeropuerto LaGuardia en Queens (Nueva York), el 27 % de Newark (Nueva Jersey) y el 26 % del aeropuerto de Boston Logan, notificó hoy FlightAware.
Además, más de 10.000 vuelos circulaban con retraso en el país, según la plataforma.