Autoridades judiciales hondureñas sepultaron este sábado los restos de 24 personas víctimas de la violencia, que se fueron acumulando desde enero en la morgue judicial capitalina sin que familiares los fueran a retirar, constataron periodistas de la AFP.
Después de un corto oficio religioso de un sacerdote, personal de Medicina Forense del Ministerio Público colocaron los cuerpos en nichos de cemento en un cementerio a 14 km al noreste de la capital.
La portavoz de Medicina Forense, Isis Alvarado, dijo a la AFP que es el segundo entierro del año, con los que suman 49 los sepultados durante 2016.
Anteriormente los cuerpos eran sepultados en el cementerio Divino Paraíso, en la periferia suroeste de la capital, en fosas comunes abiertas con tractores.
Alvarado añadió que en los 29 cuerpos acumulados en la Morgue diez fueron identificados, de los cuales cinco fueron retirados por familiares después de un campaña por medios de comunicación.