El canciller alemán, Olaf Scholz, y el líder de la oposición conservadora, Friedrich Merz, lamentaron este viernes en una primera reacción el atropello masivo contra un mercadillo navideño en Magdeburgo, en el este de Alemania, con al menos un muerto y varias decenas de heridos, y del que las autoridades regionales sospechan que se trate de un atentado.
«Las informaciones de Magdeburgo hacen presagiar algo malo. Mis pensamientos están con las víctimas y sus familias. Estamos a su lado y al lado del pueblo de Magdeburgo. Mi agradecimiento a los dedicados socorristas en estas horas angustiosas», escribió Scholz en un mensaje en su cuenta de X.
Merz, por su parte, calificó las informaciones que llegan desde Magdeburgo de «muy angustiosas».
«Mis pensamientos están con las víctimas y sus familias. Quiero dar las gracias a todos los servicios de emergencia que están atendiendo a los heridos in situ», agregó.
Según informaciones de los organismos de seguridad un BMW negro se lanzó sin frenar contra la multitud alrededor de las 19.00 horas (18.00 GMT). Se habla de entre 60 y 80 heridos.
Según medios locales el conductor ha sido detenido, pero las autoridades no han proporcionado informaciones al respecto.
Hace casi exactamente 8 años, el 19 de diciembre de 2016, un atentado terrorista con un camión contra un mercado navideño en Berlín dejó once muertos y un centenar de heridos.
Cinco años después del atentado moría otra víctima como consecuencia de sus lesiones.
El autor del atentado, el tunecino Anis Amri, disparó al conductor de un camión para hacerse con el vehículo, con el que irrumpió en el mercadillo navideño, tras lo cual logró huir a Italia, donde fue abatido por la policía.