El expresidente haitiano Jean Bertrand Aristide, acusado de corrupción, tráfico de droga y lavado de dinero, fue colocado bajo arresto domiciliario, según decisión judicial anunciada el miércoles.
El juez Lamarre Bélizaire ordenó a la policía judicial y a la administración penitenciaria «custodiar la residencia» del expresidente, situada al norte de la capital Puerto Príncipe.
La justicia de Haití había emitido el 13 de agosto una orden de arresto contra Aristide, bajo investigación por supuestos delitos de corrupción, lavado de dinero y tráfico de drogas, después de que no compareciera ante el juez.
Unas 30 personas están siendo investigadas sobre el caso, incluyendo a familiares de Aristide y exfuncionarios de su gobierno.
Aristide, el primer líder elegido democráticamente en Haití, fue elegido presidente en dos ocasiones: en 1990 y 2000. No obstante, su primer mandato fue interrumpido entre 1991 y 1994 por un golpe de estado, que le forzó a buscar refugio en Estados Unidos.
En 2001 volvió a ocupar la presidencia pero fue obligado a dimitir en 2004. Tras exiliarse en Sudáfrica regresó a Haití en 2011.
El excura católico es todavía popular en las zonas más pobres del país, por su fama como defensor de las clases más desfavorecidas, lo que le ganó la enemistad de la élite del país.