La Policía Nacional de Nicaragua sitió hoy la comunidad indígena de Sutiaba, justo en el día en que el oficialista Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) programó una marcha en apoyo al presidente Daniel Ortega, informó hoy el movimiento Coalición Leonesa.
La presencia masiva de policías y otros efectivos de las «fuerzas combinadas» del Gobierno alrededor de Sutiaba, en la ciudad de León (noroeste) impuso un ambiente tenso, y las familias temen que realicen una nueva «cacería» de jóvenes, dijo una portavoz de la Coalición Leonesa a periodistas.
La Coalición recomendó a los pobladores de León no salir a las calles y reportar cualquier violación a los derechos humanos.
Los manifestantes «autoconvocados» de León habían programado una marcha multitudinaria hoy sábado para mostrar rechazo a Ortega, sin embargo, la suspendieron cuando el FSLN anunció una «contramarcha» para este mismo día, según informó la Coalición.
El sitio a Sutiaba se da dos días después de un ataque de las «fuerzas combinadas», que dejaron al menos 4 jóvenes muertos, uno desaparecido y decenas de heridos, de acuerdo con datos de la según la Asociación Nicaragüense Pro Derechos Humanos (ANPDH).
La situación de Sutiaba es similar en casi todos los departamentos (provincias) del Pacífico de Nicaragua, así como en otros de las zonas norte y centro.
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (Oacnudh) han responsabilizado al Gobierno nicaragüense de graves violaciones a los derechos humanos.
Entre las violaciones destacan «asesinatos, ejecuciones extrajudiciales, malos tratos, posibles actos de tortura y detenciones arbitrarias cometidos en contra de la población mayoritariamente joven del país», según la CIDH, y que el Gobierno de Nicaragua ha rechazado.
Nicaragua atraviesa la crisis sociopolítica más sangrienta desde la década de 1980, con Ortega también como presidente, que ha dejado más de 310 muertos, según la ANPDH.
Las protestas contra el Gobierno comenzaron el 18 de abril por unas fallidas reformas a la seguridad social y se convirtieron en un reclamo que pide la renuncia del mandatario, después de once años en el poder, con acusaciones de abuso y corrupción en su contra.