El partido que lidera el presidente argentino, Javier Milei, La Libertad Avanza (ultraderecha), presentó un proyecto para derogar la ley del aborto, según se conoció este miércoles, aunque el ingreso en la sede parlamentaria es del 5 de febrero.
El proyecto pide la derogación de la Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE), aprobada el 30 de diciembre de 2020 y promulgada el 14 de enero de 2021, y que el aborto sea un delito penal tanto para la mujer como para quienes participen en la intervención.
Además, el texto no presenta eximente en los casos de violación, aunque deja a criterio del juez que disponga la excepción de la pena para la mujer «en atención a los motivos que la impulsaron a cometer el delito, su actitud posterior, y la naturaleza del hecho».
La mujer sería sancionada con cárcel de uno a tres años.
Según el proyecto que lleva la firma de los diputados Oscar Zago, jefe del bloque de La Libertad Avanza; Lilia Lemoine -influyente y persona muy cercana al ámbito de Milei- y otros cuatro legisladores más, habría penas de 3 a 10 años para quienes provoquen el aborto de una mujer sin su consentimiento -que podrían llegar a 15 en caso de fallecimiento de la madre-.
En el caso de que haya consentimiento, las penas serían de 1 a 4 años, que podrían aumentar a 6 si la mujer fallece.
El texto presentado en la Cámara de Diputados va encabezado por el lema que el Ejecutivo de Milei publicó recientemente en el Boletín Oficial: la declaración de 2024 como ‘Año de la defensa de la vida, la libertad y la propiedad’.
Durante su discurso en el Foro Económico Mundial, celebrado en enero en Davos (Suiza), el mandatario atacó las agendas del feminismo y del medioambiente que, según dijo, el socialismo ha conseguido colar en los organismos internacionales.
«La primera de estas nuevas batallas fue la pelea ridícula y antinatural entre el hombre y la mujer. El libertarismo ya establece la igualdad entre los sexos», indicó el economista ultraliberal, quien concluyó que «en lo único que devino esta agenda del feminismo radical es en mayor intervención del Estado para entorpecer el proceso económico».
Asimismo, puso en duda las «ideas nocivas» de quienes «sostienen que los seres humanos dañamos el planeta y que debe ser protegido a toda costa, incluso llegando a abogar por el control poblacional o en la agenda sangrienta del aborto».
No obstante, tras aquella intervención, el portavoz presidencial, Manuel Adorni, fue consultado en sus habituales comparecencias en la Casa Rosada (sede de Gobierno) y resaltó que el mandatario estaba «enfocado en lo urgentísimo», que es «enderezar a Argentina».
«(Derogar la ley del aborto) Hoy no está en agenda. Con esa definición que dio el presidente sospechamos que, en algún momento, se debatirá, pero sólo estoy sacando una conjetura en base al fragmento del discurso de Davos», aseveró.
Aprobada el 30 de diciembre de 2020 y promulgada el 14 de enero de 2021, la ley 27.610 de Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE) permite interrumpir voluntariamente el embarazo hasta la semana 14 de gestación de forma segura, legal y gratuita, siempre en un máximo de diez días desde su requerimiento.
Más allá de esas 14 semanas de plazo, el aborto sólo se permite bajo 2 causales que rigen desde la aprobación del Código Penal en 1921: cuando corra peligro la vida de la mujer o si el embarazo fue producto de una violación.
En la última manifestación celebrada en Argentina por el Día de Acción por la Despenalización del Aborto en América Latina, en septiembre pasado, en plena campaña electoral, los colectivos feministas habían expresado su temor a que un eventual Gobierno de ultraderecha supusiera un retroceso en los logros de la ‘marea verde’.