El papa Francisco aseguró este martes que es «injusto» acusar a los sacerdotes y obispos de «comunistas cuando hablan de los pobres», una suerte de advertencia ante las reacciones que suscitará su encíclica sobre el medio ambiente.
«Muchas veces se oye decir: ‘Este sacerdote habla demasiado de pobreza, este obispo habla de pobreza, este cristiano, esta monja hablan de pobreza … Son un poco comunistas, ¿no?. Al contrario, la pobreza es el eje del Evangelio», dijo el papa durante la misa matutina en su residencia Santa Marta.
Se trata de una respuesta indirecta a las reacciones que generará la nueva encíclica del papa sobre el medio ambiente, que será presentada oficialmente el jueves en el Vaticano, en la que insta a combatir contra la contaminación y la pobreza y critica el capitalismo salvaje y la grandes multinacionales como «depredadores» de la naturaleza y el ser humano.
Francisco, considerado un progresista en asuntos sociales, ha sido acusado por los neoconservadores estadounidenses de ser marxista por su condena del capitalismo salvaje y el rey dinero.
Una etiqueta que ha desmentido numerosas veces.
Poco después de ser elegido papa en 2013, Francisco explicó a la prensa que «tengo muchos amigos marxistas, pero considero que esa ideología es equivocada», dijo.