Un comando de pandilleros asesinó a balazos y desmembró a un anciano de 62 años de edad porque supuestamente los delató con la policía.
De acuerdo con las versiones policiales, la víctima estaba en su casa con su esposa cuando en la madrugada los criminales entraron a la fuerza a su habitación y lo sacaron a patadas hacia otro cuarto.
A su esposa la dejaron encerrada en la habitación.
En el otro cuarto lo acribillaron y desmembraron su cuerpo con machetes y sierras. Luego huyeron.
Cuando la anciana logró salir de la habitación corrió al cuarto contiguo y encontró el cadáver desmembrado de su esposo.
La mujer corrió a esconderse a la casa de sus vecinos hasta que la policía llegó a la escena del crimen.
Los policías explicaron a la prensa que en las paredes del cuarto los criminales dejaron escrita una nota con la sangre de la víctima: “No matamos por matar. Por sapo. Tutu”.
La pandilla que es presume es la responsable del crimen es conocida como Sanguinaria o Los Salvajes.
La víctima fue identificada como José Alberto Pinto.
Ocurrió en Miranda, Venezuela.