El Salvador
domingo 17 de noviembre de 2024

Panamá exige a Venezuela pago de millonarias deudas en plena crisis diplomática

por Redacción


Ricardo Martinelli exigió este viernes a Venezuela el pago de más de 1.000 millones de dólares adeudados a empresarios de su país.

El presidente de Panamá, Ricardo Martinelli, exigió este viernes a Venezuela el pago de más de 1.000 millones de dólares adeudados a empresarios de su país, en una escalada de las tensiones bilaterales tras la expulsión ordenada por Caracas del embajador y otros diplomáticos panameños.

«Venezuela pareciera ser que está en bancarrota, aunque no debería estarlo porque es un país muy rico. Ahí hay un verdadero desgreño administrativo y le deben a panamá cifras superiores a los 1.000 millones de dólares», declaró Martinelli a la prensa.

Venezuela «tiene que pagarle a Panamá» porque «no hay excusas». «No puede ser que se deban más de 1.000 millones de dólares y no se quieran pagar las obligaciones», añadió el mandatario.

Casi de inmediato, el presidente venezolano Nicolás Maduro acusó a Martinelli de cobrar comisiones de 20% a los empresarios de la Zona Libre de Colón por los pagos que haga Venezuela.

Funcionarios venezolanos que viajaron a Panamá «me dijeron que el presidente panameño les estaba cobrando 20% por cada factura que se cancelara», dijo Maduro en un discurso televisado.

«Yo dije: paren todos los pagos inmediatamente y nuestra relación es directa con los empresarios», apuntó Maduro, quien acusó a Martinelli de «utilizar el poder político para enriquecerse».

En la red social de Twitter, Martinelli escribió que no responderá «ataques soeces o falsas acusaciones» que Maduro, según dijo, «utiliza para desviar la atención».

«Lamentamos ese tipo de afirmaciones carentes de toda realidad. No son ciertas y no pueden ser aceptadas por el gobierno de Panamá», aseguró el canciller panameño, Francisco Álvarez De Soto.

Trasfondo político 

El cruce de acusaciones se da un día después que Maduro diera a cuatro diplomáticos panameños acreditados en Venezuela, incluido el embajador Pedro Pereira, 48 horas para abandonar el país.

Maduro rompió el pasado miércoles relaciones diplomáticas y comerciales con Panamá, al considerar que su gobierno actúa en la Organización de Estados Americanos (OEA) como «lacayo» de Estados Unidos.

La ira de Maduro se desató tras la propuesta panameña que se discute en el Consejo Permanente de la OEA de convocar una reunión de cancilleres para buscar una salida a la crisis en Venezuela causada por protestas antigubernamentales, que ya dejaron 20 muertos.

«Rechazamos categóricamente que se nos acuse de ser lacayos de nadie. Nosotros no hemos actuado por presión de nadie ni por instrucciones de nadie», replicó Alvarez De Soto.

En ese contexto surgió el tema de la deuda de empresarios venezolanos con la zona libre y la aerolínea panameña COPA, cuyas cifras varían y no están claras, de acuerdo con versiones de los propios funcionarios panameños.

Según el gerente de la Zona Libre de Colón, Leopoldo Benedetti, la deuda que mantienen los empresarios venezolanos con esta zona franca rondaría los 2.000 millones de dólares.

El ministro de economía panameño, Frank De Lima, reconoció que «no hay una cifra clara» de la deuda, porque hubo casos en que los empresarios de la zona franca panameña «sobrefacturaron» para ayudar a los empresarios venezolanos a sacar dólares del país.

La deuda está causada principalmente por la falta de liquidez de los empresarios venezolanos, ocasionada por la escasez de dólares en Venezuela, con férreo control cambiario desde 2003.

El año pasado, Martinelli se reunió en Caracas con Maduro y se creó una comisión binacional para tratar el asunto.

Pero todo ha quedado suspendido «hasta tanto en Panamá no haya un Gobierno serio que respete las relaciones que deben tenerse de respeto mutuo», según el canciller venezolano Elías Jaua.

La zona franca panameña es considerada la mayor de América Latina y se estima que aporta el 8% del Producto Interno Bruto de Panamá. En 2012, sus negocios ascendieron a los 30.740 millones de dólares, de los cuales 16.000 millones corresponden a re-exportaciones.

La aerolínea COPA emitió un comunicado en el que asegura que «sus operaciones y vuelos comerciales entre Panamá y Venezuela se mantienen con normalidad» y advirtió que no emitirá «comentarios adicionales» sobre el tema.

El empresariado panameño ha mostrado su «preocupación» tras la ruptura de las relaciones. Las empresas venezolanas tienen inversiones por 273 millones de dólares en Panamá.

Panamá exportó a Venezuela unos 1.600 millones de dólares en 2013, según cifras del Instituto Nacional de Estadísticas de Venezuela (INE).