«La ONU en Venezuela se encuentra altamente preocupada por el alto costo en vidas humanas que se ha registrado en el país con motivo de las protestas», expresó la organización en un comunicado emitido en Caracas, haciendo un llamado a los venezolanos «para que se asegure, respete y valore el derecho a la vida».
La ONU recordó que hace 12 días un «grupo de estudiantes y jóvenes de varias ciudades» instaló un campamento de más de 120 carpas en la entrada principal de su sede en el este de Caracas, el cual ha ocupado incluso parte de una importante avenida para protestar contra el gobierno por la crisis económica y la inseguridad.
«Respetamos y solicitamos que se respete el derecho de manifestarse pacíficamente al nutrido grupo de jóvenes acampados frente a las oficinas de la ONU», añadió la nota, en la que también instó a esos manifestantes a permitir «el tráfico vehicular y el acceso al edificio».
Pero la organización también rechazó «cualquier hecho violento, la destrucción de propiedad pública y privada y el obstáculo a la libre circulación de ciudadanos», que han tenido lugar en las últimas semanas.
La ONU reiteró el pedido del secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, de «asegurar la protección de los derechos humanos de todos los venezolanos», en momentos en que la Fiscalía General investiga casi 100 casos de violaciones de derechos humanos por abusos policiales durante las protestas.
El organismo saludó el «esfuerzo» realizado por el gobierno para establecer conferencias de paz con varios sectores a raíz de las protestas y que el presidente Nicolás Maduro anunciara la creación del Consejo Nacional de Derechos Humanos.
Hace dos meses, Venezuela vive una ola de protestas, iniciada el 4 de febrero en la occidental San Cristóbal, con un saldo de 39 muertos, 608 lesionados y 192 personas bajo proceso judicial.