miércoles 30 de octubre del 2024

Netanyahu defiende ante Congreso de EEUU la guerra en Gaza y culpa a Irán de las protestas

por Redacción


Estados Unidos ha sido crítico con los bombardeos israelíes sobre zonas densamente pobladas.

En un encendido discurso ante el Congreso de Estados Unidos, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, defendió este miércoles mantener la ofensiva sobre la Franja de Gaza hasta la «victoria total», prometió que no reocupará el enclave cuando termine la guerra y acusó a Irán de estar detrás de las protestas propalestinas.

“Estados Unidos e Israel deben permanecer unidos. Cuando nos mantenemos unidos, sucede algo muy simple: nosotros ganamos, ellos pierden”, declaró Netanyahu en referencia a Irán y a Hamás, desatando la ovación de los legisladores, en su mayoría republicanos dado que decenas de demócratas boicotearon la comparecencia.

La invitación al primer ministro para dar un discurso ante el Congreso fue una propuesta del presidente de la Cámara de Representantes, el republicano Mike Johnson, en medio de la creciente tensión entre Netanyahu y la Administración demócrata de Joe Biden por la guerra en Gaza.

A pesar de ser el mayor suministrador de armas de Israel, el Gobierno de Estados Unidos ha sido crítico con los bombardeos israelíes sobre zonas densamente pobladas, los ataques a hospitales y las restricciones a la entrada de ayuda humanitaria.

Netanyahu no moderó su tono y aseguró que la guerra continuará hasta la «victoria total» sobre Hamás, al tiempo que evitó ahondar sobre las negociaciones que impulsan Estados Unidos, Catar y Egipto para lograr un alto el fuego y la liberación del resto de rehenes secuestrados por el grupo islamista palestino.

El primer ministro, al que cada vez más familiares de rehenes acusan de prolongar deliberadamente el cierre de un acuerdo, se hizo acompañar en la tribuna por Noa Argamani, secuestrada en el festival de música que atacó Hamás y liberada recientemente en un operativo.

Netanyahu calificó de «sinsentido» las acusaciones de crímenes de guerra, aseguró que en el ataque a la ciudad de Rafah casi no murieron civiles y presionó a Estados Unidos para que acelere el envío de armamento.

«Dennos las herramientas más rápido y terminaremos el trabajo más rápido», dijo sobre la ofensiva que ha matado a 39.000 palestinos desde el 7 de octubre, cuando Hamás asesinó a 1.200 personas en Israel.

Sus planes para Gaza

El líder israelí abordó además uno de los puntos que más confrontación ha generado con Washington: el futuro de Gaza.

Netanyahu prometió que no tiene planes para reocupar el territorio gazatí, pero defendió que Israel debe mantener el «control de la seguridad» del enclave para garantizar que no vuelva a ser una amenaza.

No hizo ninguna referencia a la formación de un Gobierno único para la Franja de Gaza y Cisjordania, ni a la creación de un Estado palestino independiente, que son los planes oficiales de Estados Unidos.

Mientras Netanyahu hablaba, cerca de 5.000 personas lo acusaban de «genocida» y protestaban contra su presencia en las inmediaciones del Congreso, totalmente blindado con vallas de seguridad, en una manifestación que contó con la presencia de la actriz y activista Susan Sarandon.

Dentro del hemiciclo, la congresista demócrata de origen palestino Rashida Tlaib llevaba un abanico que llamaba «criminal de guerra» a Netanyahu y seis personas del público fueron detenidas por interrumpir la sesión con consignas a favor de un alto el fuego.

El primer ministro arremetió en contra de los manifestantes y los llamó «tontos útiles» del Gobierno iraní, a quien acusó de financiar las protestas contra la guerra en Gaza que durante semanas sacudieron las universidades estadounidenses.

Reuniones con Biden, Harris y Trump

La visita de Netanyahu llega en un momento de turbulencias políticas en Estados Unidos por el intento de asesinato contra el expresidente y candidato republicano Donald Trump (2017 -2021) y la renuncia de Biden a su campaña de reelección.

La presumible nueva candidata demócrata, la vicepresidenta Kamala Harris, fue una de las grandes ausentes en el discurso de Netanyahu, a pesar de que dentro de sus funciones está la de presidir el Senado.

Sin embargo se espera que el primer ministro se reúna el jueves con Biden, recién recuperado de la covid-19, y con Harris en Washington, y que el viernes se entreviste con Trump en la mansión que el magnate tiene en Florida.

Durante su discurso, Netanyahu aprovechó para agradecer el apoyo a Israel de Biden, a quien llamó «sionista», pero también para endulzar los oídos de Trump, a quien aplaudió por haber trasladado la embajada estadounidense a Jerusalén durante su mandato.

Con su cuarto discurso en el Congreso, Netanyahu es ya el mandatario extranjero que más veces se ha dirigido a los legisladores estadounidenses, superando las tres veces que lo hizo el británico Winston Churchill.