Un niño de 5 años ha muerto después de ser violado en grupo por varios jóvenes en la provincia de Herat, en el oeste de Afganistán, informó hoy a Efe una fuente oficial.
La violación tuvo lugar ayer en Herat, capital de la provincia homónima, afirmó el portavoz del gobernador regional, Abdul Raouf Ahmadi, quien explicó que el menor murió horas después del ataque en un hospital de la localidad debido a la gravedad de las heridas.
Ahmadi aseguró además al canal afgano Tolo Tv que habían sido arrestados dos sospechosos y que la Policía estaba investigando lo sucedido.
La familia de la víctima ha reclamado justicia y que los culpables de la violación y el asesinato sean condenados cuanto antes.
Pero demostrar una violación en Afganistán no es sencillo y bajo el código penal afgano un menor del que han abusado sexualmente puede ser condenado a la reclusión en un reformatorio por haber cometido el crimen de practicar sexo fuera del matrimonio.
La Comisión Independiente de Derechos Humanos de Afganistán (AIHRC) también ha denunciado que en algunas regiones del país asiático los señores de la guerra “compiten entre ellos” para ver quién “abusa sexualmente” de más “niños”.
Según un informe divulgado por AIHRC, el rapto y violación de niños se practica sobre todo en regiones del norte de Afganistán, especialmente en las provincias de Baghlan, Takhar, Jawzjan, Sari Pul y Kunduz.