Nicolás Maduro, investido por el Parlamento -de amplia mayoría chavista- como presidente para un nuevo sexenio, tras un cuestionado triunfo electoral, anunció este miércoles la creación del Ministerio de Comercio Exterior, reveló un proyecto con China para construir un nuevo satélite y prometió reformar la Constitución que el fallecido Hugo Chávez impulsó en 1999.
En su discurso anual a la nación, que tuvo como escenario el Teatro Teresa Carreño y no el acostumbrado Palacio Federal Legislativo, exhibió los logros de 2024, como un crecimiento económico de más del 9 % y una inflación del 48 %, frente al 198,8 % registrado en 2023.
Además, prometió la celebración de, al menos, diez elecciones para este año, un periodo que auguró «de mucha autoexigencia» para su Administración.
«Este año tenemos diez elecciones», aseguró Maduro en su intervención, que explicó que una de ellas será un referendo para la reforma constitucional.
Para 2025, en fechas todavía por definir, está prevista la celebración de comicios parlamentarios, regionales, locales y consejos, entre otros.
También, prometió seis consultas populares -la primera, el 2 de febrero, como homenaje a Chávez por el 26 aniversario de su llegada al poder-, en la que los habitantes de las comunas decidirán, entre varios proyectos propuestos, cuál consideran prioritario.
Por otra parte, Maduro anunció la creación del Ministerio de Comercio Exterior, encabezado por la diplomática Coromoto Godoy, quien tendrá como misión desarrollar la «vocación exportadora» de Venezuela.
Finalmente, destacó las telecomunicaciones como uno de sus ejes centrales, por lo que -dijo- Venezuela trabaja con China en el satélite «Cacique Guaicaipuro», que brindará internet satelital, a la vez que menospreció el servicio brindado por el magnate sudafricano Elon Musk: «¡Qué Starlink ni qué Starlink»!, exclamó, en referencia al servicio desarrollado por la empresa SpaceX para zonas de escasa conexión convencional.