La viróloga china Li-Meng Yan, que huyó en abril a EE.UU., asegura que su país ha mentido sobre el coronavirus y ya en diciembre pasado sabía sobre la facilidad con la que la COVID-19 se transmite entre humanos.
Yan hizo esas declaraciones en una entrevista el viernes con la cadena conservadora Fox y de la que se han hecho eco números medios locales hasta hoy.
La viróloga, que trabajaba en la Universidad de Salud Pública de Hong Kong, afirmó que el Gobierno chino sabía del peligro que suponía el SARS-CoV-2 antes de que el 31 de diciembre informara a la Organización Mundial de la Salud (OMS) del brote en la región china de Wuhan.
Además, Yan relata que ella comenzó a estudiar el virus en diciembre desde Hong Kong y estuvo en contacto con otros virólogos que estaban en china continental y tenían más información del virus.
Supuestamente averiguó que el virus se estaba transmitiendo muy rápido entre personas, algo que todavía se desconocía, e informó de sus hallazgos al doctor Leo Poon, un presunto contratista de la OMS que ocultó su investigación y le pidió que guardara silencio, dejando entrever que podría perder la vida.
«Él me pidió que guardara silencio y que tuviera cuidado. Que no tocara la línea roja, es decir, que no fuera contra los procedimientos del Gobierno de China y que no contradijera sus principios. Si no, me metería en problemas y podría ‘desaparecer'», dijo Yan a Fox.
La viróloga acusa a la OMS de «corrupción» y complicidad con el Gobierno de China, una hipótesis que el presidente de EE.UU., Donald Trump, ha abanderado desde el inicio de la pandemia.
Yan fue entrevistada en Fox, la favorita del mandatario y que durante años ha dado alas a teorías a conspiratorias.
Efe no pudo comprobar de manera independiente la veracidad de las afirmaciones de Yan.
La OMS ha negado las acusaciones de la viróloga y dijo a Fox que «mucha gente trabaja para ellos como consultores» pero no tienen datos que acrediten que Yan, como ella afirma, trabajara para un laboratorio de referencia de la organización especializado en virus y pandemias.
La OMS dijo a Fox que tampoco tiene en sus archivos datos sobre Poon, el supervisor de Yan.
Desde el inicio de la pandemia, 12,7 millones de personas se han contagiado en todo el mundo y más de 565.700 han perdido la vida, de acuerdo al recuento independiente de la Universidad Johns Hopkins en EE.UU.