La viuda de Nelson Mandela, Graça Machel, renunció oficialmente a la mitad de la herencia del ícono de la lucha antiaparteid, estimada en 46 millones de randes (3,100 millones de euros), indicó el martes uno de sus ejecutores testamentarios.
El premio Nobel de la Paz 1993, fallecido el 5 de diciembre a los 95 años, dejó varios bienes a la viuda del expresidente de Mozambique Samora Machel, con quien se casó en tercera nupcias el día de sus 80 años, con la condición de que renunciara a la mitad de la herencia que le correspondería.
«Machel aceptó formalmente y por escrito los bienes legados por el último testamento del antiguo presidente», indicó a la agencia Sapa el juez constitucional Dikgang Moseneke.
Graça Machel, de 68 años, recibirá entre otros cuatro propiedades en Mozambique, coches, obras de arte y joyas, adquiridas por la pareja desde su matrimonio.
Nelson Mandela dejó dinero a sus hijos y a sus nietos -pero no a su exesposa Winnie-, a los hijos y nietos de Graça, a sus antiguos colaboradores, a diferentes establecimientos escolares y al Congreso Nacional Africano (ANC), el partido del que fue el más célebre militante.
Nelson Mandela pasó 27 años en las cárceles del régimen racista del apartheid contra el que luchó. Tras su liberación logró calmar las tensiones entre negros y blancos en Sudáfrica y se convirtió en el artífice de la reconciliación en el país -del que fue el primer presidente negro entre 1994 y 1999- y en el mundo entero.